Fútbol Cubano: Diablos remontan y retienen corona en Apertura

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En un repleto “Luis Pérez Lozano”, los Diablos Rojos de Santiago de Cuba sacaron a relucir su mejor oficio para mantener el reinado en el Torneo Apertura de Fútbol, luego de remontar ante el joven once de Cienfuegos y llevarse la victoria en la final con cerrada pizarra de dos goles por uno.

Para los amantes del balompié nacional la jornada resultó una verdadera fiesta, pues solo ver una cancha emblemática volver a llenarse de punta a punta luego de casi quince años, es signo de lo que lograron los actuales Marineros, que han devuelto el orgullo a sus seguidores.

En materia futbolística hay varios aspectos que señalar. Primero que la presión pasó sin dudas facturas a la tripulación, de la cual solo el incombustible Reinier “Coco” Cerdeira sabía lo que era disputar un título ante gradas repletas.

Para nada los santiagueros se sintieron incómodos en el terreno de TIERRA que sirve como cuartel general a los nuestros, y fue precisamente porque los discípulos del DT Francisco Carrazana equivocaron la estrategia, y jugaron el sistema que más favorecía a su rival: el de balonazos al espacio en busca de lo que pudieran hacer sus hombres de punta, los cuales se vieron anulados por la estatura, las “libras” y las horas de vuelo de los defensores indómitos.

Pese a ello, el primer tanto llegó en favor de los locales, cuando el talentoso Jassael Herrera levantaba las tribunas al minuto 28. El lance sobrevino en servicio preciso de José Dayán Pérez desde el lateral.

A partir de ahí los marineros tomaron cierto control del choque, con matices de su característico juego de toques rápidos y rasos, pero instantes antes del medio tiempo, corriendo ya el ’45, un envenenado cobro santiaguero a balón parado, rozado por la testa del capitán sureño Neisser Sandó, dejó sin opciones al cancerbero de casa, para decretar el autogol del Capi y la igualada en el pizarrón.

Luego del descanso, sinceramente desapareció Cienfuegos. Más que todo a la salida del central José Daniel García Matienzo después de un encontronazo. A partir de ese momento las llegadas de los santiagueros, así como su control del compromiso, se acrecentaron.

Un descuido de la defensa permitió que el recién ingresado Carlos Rafael Espinosa pusiera delante a los visitantes en el ’77, y aunque en honor a la verdad los cienfuegueros lo intentaron con todo, faltaron las ideas y la claridad para conseguir al menos la igualada.

Al final, lágrimas en los jóvenes rostros de los vencidos y reconocimiento de parte de los vencedores, que además de elogiar las virtudes de sus rivales, dedicaron frases de elogio para la afición.

El próximo sábado dará inicio el Torneo Clausura, y Cienfuegos debuta en casa, al recibir a Matanzas en el “Luis Pérez Lozano”.

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Carlos E. Chaviano Hernández

Periodista y Director de programas de televisión.

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