El apazote de Babalú Ayé

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En la Cuba prerrevolucionaria, antes del primero de enero de 1959, era frecuente entre las familias campesinas el uso de cocimiento a base de una hierba con potente olor y sabor, cuya cura, se decía, era para expulsar las lombrices intestinales. Por entonces abundaba el parasistismo, sobre todo en la población infantil rural en los campos de la Mayor de las Antillas.

Si bien esas prácticas quedaron en desuso con los programas y campañas del Ministerio de Salud Pública, los que ya peinamos canas recuerdamos al apazote como la planta ideal para combatir esos parásitos, aunque su empleo no se restringía solo al remedio contra los helmintos.

De los remedios naturales y la cocina
El apazote le pertenece a Babalú Ayé.

El epazote, también llamado apazote, ipazote, pazote, pazoli y paico, dependiendo de la región geográfica, tiene por nombre científico Dysphania ambrosioides. Es una planta aromática silvestre originaria del continente americano, ya conocida por los aztecas. De hecho, su nombre deriva del Náhuatl “epatl”, hierba fétida, y “tzotl”, dulce, haciendo referencia al olor que desprende, a la vez fuerte y dulzón.

Desde la época prehispánica, las civilizaciones azteca y maya le atribuían beneficios a la planta, principalmente relacionados con el sistema digestivo, ya sea su uso en forma fresca, seca o como infusión. Luego, dentro de sus propiedades medicinales destacan el disminuir los dolores menstruales (cólicos), estomacales e intestinales; asimismo, elimina los parásitos, calma el nerviosismo excesivo, descongestiona las vías respiratorias y aumenta la producción de leche materna.

De acuerdo con el sitio web El Universal, para preparar una infusión de epazote únicamente es necesario calentar agua y añadir una cucharada de la hierba deshidratada o 6 a 8 hojas medianas, para después dejar infusionar por 5 minutos. Se debe colar y lo más recomendable es beberla mientras aún está caliente. Debido a su fuerte sabor, puede endulzarse con miel de abeja, aunque hay quienes aseguran que unas gotas de limón ayudan a obtener un gusto más agradable.

Consulte a su médico, úselo con moderación

No obstante las bondades que ofrece, el pazoli debe ingerirse con moderación, pues contiene ascaridol, un aceite que puede ser tóxico para el organismo si se consume en exceso. Recuerda que si padeces alguna enfermedad, debes consultar con tu médico si esta bebida es apta para ti.

Aunque el susodicho es conocido en toda América, se popularizó con su nombre náhuatl que significa “animal hediondo” debido a su característico mal olor que recuerda a las mofetas o zorrillos. Sin embargo, también se le llama paico, hierba fétida o sagrada y ambrosía, entre otros, de ahí que en algunos lugares también lo conozcan como epazote de zorrillo.

El té de las hojas de apazotees rico en antioxidantes.

Y para que vea la contradicción, gracias a su sabor particular, el apazote es muy apreciado en la cocina y forma parte de diversas preparaciones, especialmente en la gastronomía indígena del sur de México. Como hierba aromatizante le confiere a los platos un gusto rústico y único. Además, es añadido a las comidas pesadas por sus propiedades digestivas.

Al igual que todas las hierbas verdes, el ipazote contiene fibras que mejoran la función digestiva e intestinal. Por esta razón, es común que agreguen hojas de la planta a platillos difíciles de digerir como frijoles o alubias. Del mismo modo, también se puede tomar una infusión en caso de indigestión o flatulencia.

Un artículo publicado en el sitio Mundo deportivo da cuenta de que “en lo que realmente brilla esta hierba es en la medicina indígena. El té de las hojas y otras partes de la planta son ricos en antioxidantes, como vitaminas A, B y C, componentes que contribuyen a retrasar el envejecimiento. Ayudan a disminuir la inflamación, aumentar la respuesta antibacteriana y facilitar la producción de enzimas digestivas.

Agrega además que el té también contiene ácido fólico y minerales que mantienen la salud de los sistemas digestivo, glandular, respiratorio, musculo-esquelético y tegumentario (piel, cabello y uñas).

Los antiguos aztecas descubrieron que el brebaje calmaba las afecciones respiratorias. Por ejemplo, quienes padecen asma pueden consumir esta infusión para reducir las crisis comunes de esta enfermedad, junto al tratamiento médico.

Es útil para quienes presentan bronquitis, neumonía o catarros, ya que permite la expulsión de flemas y calma la inflamación.

Según los herbolarios tradicionales, el ascaridol presente en la planta elimina gusanos y protozoos, estudios de laboratorio así lo confirman. Para estas investigaciones se utilizaron parásitos responsables de la esquistosomiasis, toxocariasis en perros y gatos, leishmaniasis, amibiasis, enfermedad de Chagas y malaria.

Aunque la yerba no mata directamente a las bacterias, el apazote evita que estos microorganismos sean resistentes a los antibióticos. “Así lo demostró un estudio con estafilococos, uno de los principales responsables de infecciones en todo el organismo. Asimismo, la especie es útil frente a la presencia de hongos como la Cándida albicans, el cual causa infecciones vaginales”, comenta Mundo deportivo.

A saber, los huesos están formados por la síntesis de una gran cantidad de minerales como calcio, manganeso, magnesio y fósforo… por lo que el consumo de estos minerales debe estar presente en nuestra dieta. El epazote contiene estos nutrientes que nos ayudan a preservar la salud.

La infusión de esta hierba contiene niveles moderados de potasio, lo que le otorga efectos como vasodilatador, ideales para reducir la tensión arterial. De esta manera, uno de los impactos de la planta es la disminución del riesgo de padecer arterioesclerosis o accidentes cardiovasculares.

Los antiguos aztecas descubrieron que el brebaje calmaba las afecciones respiratorias.
Mitos que cuentan

El epazote le pertenece a Babalú Ayé. Las hojas de la planta se emplean para sazonar la comida que se ofrenda a la deidad. También sirve para amarrar y hacer callar a alguien que habla demasiado, procedimiento que los santeros saben muy bien como realizarlos.

Babaluayé o Asojano, Rey de Dahomey, es muy adorado en Cuba por los arará. Representa las epidemias terrenales y, por ende, protege de las mismas. Del mismo modo resulta un orisha que proporciona mucha prosperidad económica para quién lo posee. Es misterioso y justo. No le gusta el mal vivir de sus hijos y cuando se salen del camino, los vuelve a meter con pruebas sugerentes. Siempre aparece acompañado de dos perros que lo cuidan y de su escobilla que utiliza para espantar las moscas, portadoras de enfermedades.

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Armando Sáez Chávez

Periodista de la Editora 5 de Septiembre, Cienfuegos, Licenciado en Español y Literatura y Máster en Ciencias de la Educación

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