Cienfuegueros aportan a barrida de los Domadores
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Tanto Saidel Horta en los 57 kilogramos como Erislandy Álvarez en los 63, 5, hicieron la tarea para completar la total barrida de los Domadores de Cuba ante la escuadra francesa, en el promocionado tope que se efectuó en el afamado balneario de Varadero, y donde los locales, con una mezcla de púgiles establecidos y jóvenes en ascenso, lograron ganar todas sus peleas por veredicto unánime de 5-0.
El subcampeón universal Horta dispuso sin contratiempos del número dos del viejo continente Samuel Kistohurry, mientras Erislandy, también plateado mundial, fue demasiado para Robert Grau, sustituto de última hora del triple campeón a esa instancia y subtitular olímpico Sofiane Oumiha, aquejado de molestias musculares.
Precisamente Álvarez fue el encargado de poner la guinda al pastel, pues su combate ante Oumiha se había previsto como cierre de la velada, en lo que sería la revancha del cubano ante su verdugo en el último certamen mundialista.
El tope, acogido por el hotel Brisas del Caribe, tuvo un inicio trepidante aportado por el tercero mundial Alejandro Claro (51 kg), quien no creyó en el mayor palmarés de un Billal Bennama dueño de tres preseas a ese nivel (una de plata y dos de bronce).
En el resto de los enfrentamientos, el bicampeón olímpico Julio César La Cruz (92 kg.) repitió dominio sobre Soheb Bouafia, mientras el también doble monarca bajo los cinco aros, Arlen López, pasó sobre el monarca europeo de la categoría sub-22 César Yorelin en los 80.
Rolando Martínez (57 kg) sumó otro desenlace interesante como señal de progresión al disponer del número tres del orbe Samuel Kistohurry, y sin problemas se impuso Jorge Cuéllar (71 kg) a costa de Makan Traoré, bronceado en los juegos europeos.
En uno de los momentos más esperados de la noche, el subcampeón del planeta Fernando Arzola (+92 kg) tomó desquite de lo sucedido en Tremblay al doblegar a Djamili Aboudou con cuenta de protección incluida en el segundo asalto.
El tope fue presenciado por el presidente del Inder, Osvaldo Vento Montiller, y el embajador galo en la Isla, Laurent Burin Des Roziers. La jornada puso punto final a un campamento animado por competidores de siete países, como parte de la puesta en forma hacia la justa bajo los cinco aros.
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