Central 14 de Julio de Cienfuegos cumple en la zafra chica
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Cuando el calendario marca la 192 contienda azucarera consecutiva del central 14 de Julio, de Cienfuegos, sus trabajadores acaban de cumplir esta mañana el compromiso productivo de la llamada zafra chica (hasta el 31 de diciembre), ascendente a 4 mil 589 toneladas.
Al decir del ingeniero Amaury Rodríguez Depestre, director general de esa Empresa Agroindustrial Azucarera (EAA), los resultados que escoltan la fabricación del dulce, luego de 26 días de la arrancada, corroboran la calidad de las reparaciones, aun con todas las limitaciones de insumos y recursos materiales, y al mismo tiempo exaltan las condiciones humanas, políticas y laborales de este Colectivo Vanguardia Nacional, empeñado en sobrecumplir las 9 mil 333 toneladas que tienen de plan técnico económico.
Entre los indicadores más sobresalientes del otrora ingenio Manuelita exhiben un aprovechamiento de la capacidad instalada, con molidas que rondan el 80 por ciento, seis puntos porcentuales por encima de lo planificado. En tanto, el rendimiento industrial se eleva a 9,50 (un entero superior a lo fijado para la fecha). Solo por este concepto lograron un ahorro de 8 mil 843 toneladas de caña, lo que equivale a un aporte de 663 t de crudo.
Como ya nos tiene acostumbrado el central insigne de la provincia, todo el azúcar fabricado es de primerísima calidad, que dicho sea de paso, hasta el monento han ensacado más de 2 mil t con destino a la canasta básica de la población de Cienfuegos y del municipio especial de Isla de la Juventud, y continúan en esa operación.
Sin bien no hay discusión alguna de que estamos en presencia de un ingenio con notables resultados productivos y de eficiencia, para los trabajadores y el consejo de dirección de esta entidad existe la insatisfacción de no disponer de la materia prima propia para poder autoabastecerse.
“Para nosotros el principal desafío, además de hacer una buena zafra, consiste en frenar el decrecimiento cañero y revertir esa situación con una estrategia que nos permita alcanzar mayor rendimiento por hectárea”, aseguró el director general de la EAA.
Por lo pronto, entre las tareas agrícolas de primer orden están “rompiendo” tierras, dando cultivo profundo, atención a los retoños y certificando las norisas para el riego de amoniaco, sin descuidar la siembra en áreas beneficiadas por el agua.
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