La llama que siguió ardiendo en Bayamo
Solo imaginar el suceso estremece: una ciudad envuelta en llamas; miles de propiedades destruidas; un firmamento enrojecido por incontables brasas humeantes y, en el aire, el ardor patrio de un pueblo sublime que, aferrado a su independencia, decidió prender una antorcha de dignidad para todos los tiempos.
Leer más