“Mi memoria está bien”, responde Biden, visiblemente enojado, al informe de un fiscal

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“¿Cómo diablos se atreve a plantear eso?”, sostuvo airadamente el mandatario estadounidense, Joe Biden, durante una conferencia de prensa convocada a última hora el jueves 8 de febrero, en la que respondió al informe de un fiscal que cuestiona reiteradamente su memoria.

Biden, que a sus 81 años aspira a la reelección, aseguró que su memoria “está bien” y criticó algunos de los puntos del informe del fiscal especial, Robert Hur, quien decidió no presentar cargos contra el mandatario, a pesar de concluir que retuvo de manera intencional documentos clasificados de su periodo como vicepresidente.

En el documento presentado por el fiscal tras la investigación, este asegura que Biden mostró una “memoria significativamente limitada” durante los interrogatorios que se le hicieron en 2023. El fiscal, además, describió al presidente como un “hombre de edad avanzada, con buenas intenciones y con mala memoria”.

Horas después de conocerse ese documento, en una imprevista rueda de prensa, en la Casa Blanca, el gobernante respondió, visiblemente molesto, que algunas afirmaciones del fiscal especial sobre su memoria son erróneas y negó haber retenido intencionalmente documentos clasificados.

“Tengo buenas intenciones, soy un hombre mayor y sé qué demonios estoy haciendo”, contestó Biden a la pregunta de un periodista.

“No infringí la ley. Y punto”

“Nuestra investigación descubrió pruebas de que el presidente Biden retuvo y divulgó voluntariamente material clasificado después de su Vicepresidencia”, se especificaba en el documento del fiscal.

Pero, Biden insistió este jueves en su inocencia: “No infringí la ley. Y punto”.

“Asumo la responsabilidad por no haber revisado exactamente lo que mi personal estaba haciendo. Entraban y salían. Algunas cosas aparecieron en mi garaje, otras salieron…”, agregó.

El fiscal especial dijo que procesar a Biden por este caso era “injustificado, poniendo en consideración los factores agravantes y atenuantes” y detalló que las pruebas “no establecen la culpabilidad” del presidente “más allá de toda duda razonable”.

Biden ha sido objeto de investigación desde hace un año, cuando se encontraron en su vivienda de Delaware y en una oficina privada documentos clasificados de la época en la que fue vicepresidente de Barack Obama (2009-2017).

Los documentos fueron encontrados por los abogados de Biden en noviembre y diciembre de 2022, y entregados inmediatamente a los Archivos Nacionales, el organismo que tiene que resguardarlos, tras lo cual el Departamento de Justicia abrió una investigación.

El expresidente y precandidato republicano Donald Trump (2017-2021)  también fue investigado por retener documentos oficiales en su mansión de Florida y fue imputado de 40 cargos ya que durante meses se negó a entregarlos.

Un lapsus en su rueda de prensa

Al explicar su decisión de no presentar cargos contra el mandatario, el fiscal especial se enfocó en la “memoria” del presidente e incluso aseguró que, durante los interrogatorios, no recordó las fechas en las que ocupó la Vicepresidencia y tuvo dificultades para recordar la fecha de la muerte de su hijo Beau, en 2015.

“¿Cómo demonios se atreve a plantear eso?”, reclamó Biden.

Pese a la vehemente declaración sobre su salud mental, la rueda de prensa, en la que también habló de la situación en la Franja de Gaza, desencadenó nuevos comentarios porque en un punto de la intervención confundió al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, con el de Egipto, Abdelfatah al-Sisi.

“Creo que, como saben, inicialmente el presidente de México, Sisi, no quería abrir la puerta para permitir la entrada de ayuda humanitaria”, dijo Biden al referirse a la situación en Rafah, en el sur de Gaza y fronteriza con Egipto.

Las dudas sobre su edad en plena campaña

Aunque Biden fue eximido de cargos, las conclusiones del fiscal representan un duro golpe para su campaña a la reelección dado que subrayan la mala memoria del mandatario, que busca un nuevo mandato a sus 81 años.

Justamente, la edad de Biden ha generado división entre los electores, parte de los cuales dudan de que pueda afrontar un nuevo mandato. Analistas consultados por France 24 consideran que Biden, el mandatario de mayor edad de la historia de Estados Unidos, tiene el gran desafío de convencer a los votantes de que puede aguantar cuatro años más en el cargo.

La edad de Biden es un gran problema y sumemos que los índices de aprobación de su gestión también son históricamente bajos para un presidente en este momento de su primer mandato. Si las elecciones fueran simplemente un voto de ‘sí o no’ a Biden, perdería de manera aplastante”, sostiene Henry Olsen, investigador principal del Centro de Ética y Políticas Públicas de Washington.

Un sondeo de Yahoo News/YouGov, divulgado el 30 de enero, apunta a que, si bien hay una resignación ante la consolidación de Biden como el candidato presidencial demócrata, el bajo entusiasmo es patente entre los votantes consultados (1.594 adultos estadounidenses), sobre todo por su edad: solo 33% cree que está “en condiciones de cumplir otro mandato”; mientras una mayoría (56%) dice que no.

Con EFE, AP y Reuters

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