La crítica artístico-literaria en el Periódico 5 de Septiembre
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La crítica-artístico literaria es una de las principales preocupaciones y ocupaciones del segmento cultural del Periódico 5 de Septiembre. Tanto así que, de prestarle atención al tan significativo apartado, este se ha convertido al correr de los años en una de las fortalezas distintivas del medio.
Nuestro semanario, lo mismo en la página cultural impresa de cada viernes que en la versión digital, cuenta con varias columnas dedicadas a la crítica, algo impensable en otros órganos de provincia.
El medio le debe lo anterior, en notable medida, a la presencia de un prestigioso equipo de colaboradores que firma la mayoría de estas columnas.
Así, de “Policromías”, dedicada a la crítica de artes visuales, se encarga alguien cuya calidad autoral rebasa fronteras, en tanto constituye uno de los críticos más agudos del país: Jorge Luis Urra Maqueira. El “Maque”, como cariñosamente le llamamos, no pierde la brújula, entre otros tantos temas que atiende, de cada una de las exposiciones montadas en el territorio, sean de la Uneac -institución a la cual pertenece-, o no.
Otras colega suya de la referida organización de vanguardia, la artista e investigadora Sandra Busto, tiene a su cargo la columna “Nuestra música y sus protagonistas”, la cual, como su nombre lo indica, se dirige a la manifestación sonora. Reconocida por sus compañeros de la provincia en virtud de su labor, por varios años ya, en 5 de Septiembre, los comentarios de ella son un referente jerarquizador que muchos tienen en cuenta.
Aunque es una columna que atienden diversos especialistas, en la recta más reciente los reconocidos escritores Ernesto Peña González (Premio Alejo Carpentier de Novela) y Alexis García Somodevilla conducen la columna de crítica literaria “Oficio de leer”, que, fundamentalmente, reseña los títulos publicados por las editoriales cienfuegueras.
El también miembro de la Uneac, de la Fipresci y su filial nacional, Julio Martínez Molina, lleva dos columnas: “La religión del fotograma”, dedicada a la crítica de cine; y “Anteriormente en…”, abocada al comentario de las series de televisión, vertiente esta último en la cual este medio fue precursor a escala nacional.
Aunque no se trata exactamente de una columna de crítica, el poeta, Premio Nacional de Cultura Comunitaria e integrante de la Uneac, Alberto Vega Falcón, tiene bajo su égida la columna “El punto del poeta”, que entre otras muchas virtudes, cuenta la de dar espacio y voz a un sinnúmero de artistas y juglares locales que, pese a su fecunda obra de vida, casi nunca han sido publicitados en los medios.
En tanto, la vicerrectora del Instituto Superior de Arte y Doctora en Ciencias Históricas, Alegna Jacomino Ruiz (también milita en la Uneac) es la titular de una columna de pensamiento, de tanta significación, como “Del alma de la nación”.
A las anteriores, la página cultural del periódico 5 de Septiembre suma “Videojuegos, el décimo arte”, una columna instaurada en 2023 y que responde al interés de la juventud cubana por dicha manifestación artístico-industrial, todo un fenómeno global. Se encarga de esta, Julio Marcial Martínez Hidalgo, joven adquisición de nuestro medio. Es el único periódico provincial que aborda el tema, desde un punto de vista crítico.
Pese a los logros, aún contamos con la ausencia de crítica regular en una disciplina como el Teatro. Aunque creadores como Atilio Caballero u otros han incursionado de manea eventual, es un déficit que el medio precisa saldar de forma estable.
Al defender la crítica artístico-literaria, el Periódico 5 de Septiembre potencia eso que como un mantra se ha repetido una y otra vez en congresos de la Uneac: la movilización del juicio crítico (evaluativo, comparativo, interpretativo, clasificador), desde la óptica de prestigiosa figuras, sobre distintos eventos; así como acerca de los procesos de entrelazamiento que dan continuidad, ruptura o crecimiento en el sector cultural.
“La misión del crítico no consiste tanto en explicar una obra como en acercarla al espectador: limpiar nuestra vista y espíritu de telarañas, colocar el cuadro bajo una luz más favorable”, expresaba el mexicano Octavio Paz.
Así pues, nuestros críticos constituyen testigos especializados, lo cual les obliga a una preparación rigurosa y progresiva; a tener un compromiso real con los lectores, y que han tenido de sobra.
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