Concierto Sur abre las puertas de su sede para una nueva entrega
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Un concierto dedicado al amor y la amistad y al aniversario 205 de la ciudad de Cienfuegos, constituyen motivaciones para la Orquesta de Cámara Concierto Sur para abrir las puertas de su sede mañana 25 de febrero, a las 9: 00 p.m. La cita tendrá lugar en la Avenida 50 No. 3905, entre 39 y 41.
Bajo la dirección musical de Fidel Alejandro Ramos Pérez, el programa del concierto está integrado por una exquisita selección de obras del pentagrama universal y cubano, de elevada y compleja ejecución en el ámbito interpretativo y que fueron escritas entre el Siglo XlX y XX.
El concierto comenzará con el primer movimiento del Quinteto de Cuerdas Op. 77 del compositor checo Antonin Dvorak (1841-1904), considerado como uno de los más versátiles del Siglo XlX. La obra, escrita en 1875, posee una complejidad que podemos catalogarla como virtuosa, por lo que su interpretación es todo un reto. Fue compuesta para un concurso de música de cámara patrocinado por una organización de Praga, conocida como Círculo Artístico y llegó a ganar el premio y los elogios del jurado. Una de sus principales características es la adición del contrabajo al formato estándar del cuarteto de cuerdas, enriqueciendo la sonoridad y dando una sensación de amplitud de espacio. Vale acotar que el próximo primero de mayo se estarán cumpliendo 120 años de la desaparición física de este extraordinario músico.
El primer movimiento de la Sinfonía No. 7 del compositor alemán Félix Mendelssonh (1809-1847), será la segunda propuesta de la noche, homenajeando a un músico incansable en la búsqueda de la perfección, considerado en su época como director de orquesta, pianista, organista y compositor.
La Sinfonía No. 7 fue escrita entre finales de 1821 y principios de 1822, para algunos críticos marca su paso entre el niño prodigio estudiante y el compositor adulto serio; aunque tuviera solo entre 12 o 13 años cuando la creó. La obra marca un alejamiento de sus anteriores sinfonías y es un encuentro de Mendelssohn con su propia personalidad compositiva. El pasado 3 de febrero se cumplieron 215 años de su natalicio.
Dentro de la música de concierto cubana interpretarán Gitanería y Malagueña, ambas de la autoría de Ernesto Lecuona (1895-1963), a quien se le ha llegado a reconocer como un compositor con extraordinarias facultades, que utilizó como uno de sus principales recursos la expresión semántica. Se basó en lo popular para confeccionar su obra, pero con ese don distintivo de ser llevada al plano de concierto sin perder su frescura y vivacidad rítmica. El pasado 29 de noviembre se cumplieron 60 años de su desaparición física.
Camerata en guaguancó, de Guido López Gavilán (1944), uno de los más importantes compositores y directores de orquestas contemporáneos cubanos, además de excelente pedagogo, está entre las obras que se podrán disfrutar este domingo. López-Gavilán es Premio Nacional de Música 2016 y miembro del Colegio de Compositores Latinoamericanos de Música de Arte. Este 2024 el Maestro está celebrando sus 80 años de vida. El pasado 22 de febrero, durante la 32 Feria Internacional del Libro, se presentó su texto La dirección orquestal sinfónica, su expresión en Cuba, primer libro escrito en nuestro país que aborda el tema y ofrece el testimonio, vivencias y conocimientos del afamado y querido compositor. El texto es una suerte de legado para las nuevas generaciones que se acerquen al estudio o la praxis de la dirección orquestal. La obra que será interpretada, está considerada como un clásico de la música cubana, donde el compositor asumió el reto de llevar a un formato de cuerdas un género de la música popular, con elegancia y estilo.
Amor Fugaz y Bonito y Sabroso, ambas composiciones de la autoría de nuestro Bárbaro del Ritmo, han sido las escogidas para cerrar el concierto. Benny Moré (1919- 1963), fundamentalmente conocido en el ámbito de la música popular, la calidad de sus composiciones permiten la posibilidad de llevar sus obras al plano de la música de cámara.
Moré se distingue también por su gran versatilidad interpretativa y es muy interesante cómo se conjuga la sensualidad de la tradición popular cubana en la interpretación de un conjunto instrumental, al que visualizamos, principalmente, dentro de la llamada música de concierto. El pasado 19 de febrero, se cumplieron 61 años de su desaparición física.
Una vez más se evidencia que música es una sola, lo importante es la calidad en la factura, un arreglo que le permita mantener su frescura e interpretación magistral a músicos que defienden altos estándares de cultura, y al mismo tiempo realzan también la nacional y la local.
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