Un proceso necesario que reconoce servicios de salud seguros y de alta calidad

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Los hospitales de Cienfuegos —el provincial Gustavo Aldereguía Lima y pediátrico Paquito González Cueto—  acogen a integrantes de la Junta Nacional de Acreditación, con el propósito de llevar a cabo la evaluación in situ de las especialidades de cardiología y psiquiatría infantil en los programas de posgrado.

La Dra. Yanara Calzada Urquiola, jefa del servicio de psiquiatría infanto-juvenil en el HPU significó la importancia de estos procesos. “Un programa que tras haber cursado un proceso de evaluación externa, obtenga alguna de las categorías superiores de acreditación (calificado, certificado o de excelencia) tiene la certificación de su nivel de calidad y constituirá un aval para la evaluación de la actividad posgraduada de la institución donde se desarrolla. Además, constituye el referente por el cual se realizan evaluaciones periódicas; es el «deber ser» de las cualidades óptimas del programa y ofrece adicionalmente autonomía relativa en su funcionamiento según lo que establece el Reglamento de la Educación de Posgrado de la República de Cuba, y las Normas y Procedimientos para la Gestión del Posgrado, puntualizó.

Por su parte, el Dr. Néstor Hernández León, jefe del servicio de cardiología en el hospital de la familia cienfueguera destacó que la autoevaluación constituye el elemento central y más importante, cuya planificación, organización, ejecución y supervisión está a cargo de personas comprometidas con el programa.

“Permite conocer, dijo, cuáles son sus principales fortalezas y debilidades y en correspondencia establecer un plan de mejoramiento que debe reunir aquellas acciones que contribuyan a alcanzar niveles superiores de calidad en cada uno de los procesos evaluados”.

Con anterioridad, otras especialidades ya han sido acreditadas en Cienfuegos, cómo terapia intensiva, oftalmología, medicina Interna, higiene y epidemiología, endocrinología y pediatría. Todas con excelentes resultados.

La evaluación y acreditación de especialidades constituye un proceso voluntario mediante el cual una organización de salud es capaz de medir la calidad de sus servicios y el rendimiento de los mismos, frente a estándares reconocidos a nivel nacional o internacional.

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