Cuba a casi un año del inicio de la pandemia
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En medio de una situación epidemiológica compleja por el rebrote de la COVID-19, pero con cuatro candidatos vacunales propios contra la enfermedad, Cuba cumple hoy 11 meses del registro de los primeros casos.
Las cifras de diagnósticos diarios se han mantenido elevadas durante las últimas semanas, y se registra un aumento del número de pacientes en terapias intensivas y de fallecidos por complicaciones asociadas al padecimiento.
Hasta este jueves (parte de cierre a la medianoche del miércoles), el Ministerio de Salud reporta un total de 35 mil 772 casos confirmados y 253 decesos.
El doctor Francisco Durán, director nacional de Epidemiología, en cada una de sus intervenciones para actualizar los datos sobre la situación en Cuba y el mundo asegura que ‘una buena parte de la población aún no ha interiorizado los peligros de la enfermedad’.
Enero fue el mes más crítico de este tiempo de pandemia, con un total de 15 mil 536 contagiados, de los cuales 70 perdieron la vida.
El acumulado de casos ese mes sobrepasó a todos los confirmados en los nueve meses anteriores, pues de marzo a diciembre de 2020 se diagnosticaron 12 mil 56 personas en Cuba con el virus.
En estos últimos meses, se reportan altas cifras de menores de edad contagiados, siendo enero el más complejo con un total de mil 624 infantes, una cifra superior a la suma de los casos registrados entre marzo y diciembre de 2020 (mil 308).
Hasta la fecha, no se reporta ningún fallecimiento en ese grupo etario, pero dichas cifras representan un llamado de atención a padres y familiares para extremar las medidas sanitarias y evitar el contagio, alertó el doctor Durán.
Aunque los especialistas explican que la mayoría cursan la dolencia de forma asintomática o con una leve sintomatología; algunos casos llegan a terapia intensiva donde precisan atención más especializada.
Los modelos matemáticos esbozados por científicos cubanos advierten que en febrero la tasa de incidencia de casos positivos con la enfermedad será más elevada.
Hasta este miércoles, permanecen ingresados en hospitales 4 mil 768 pacientes con el virus activo, de ellos 4 mil 695 con condición estable, 37 en estado grave y 36 críticos.
Durán aclaró también que si las personas refuerzan los cuidados y mantienen las medidas higiénico-sanitarias, los números comenzarían a bajar a partir de marzo.
Desde el inicio de la pandemia, este país cuenta con protocolos de atención al paciente que se fueron actualizando y han permitido que hoy 30 mil 695 personas se encuentren recuperadas. Estos últimos reciben un seguimiento por parte de especialistas de salud e investigadores que estudian las posibles secuelas de este coronavirus.
En medio de todo el complejo escenario, el Gobierno nacional refuerza las medidas para reducir los contagios, que incluyen el retroceso de fases de la etapa de recuperación en varias provincias; así como la exigencia de un PCR negativo a viajeros provenientes del exterior y un llamado a cumplir los protocolos sanitarios, entre otras.
Asimismo, el intenso trabajo de investigadores cubanos para encontrar una cura contra la enfermedad y lograr inmunizar a la población ya muestra resultados.
Cuba desarrolla cuatro candidatos vacunales y dos de ellos por sus resultados avanzarán en marzo a fase III de ensayos clínicos: Soberana 02, del Instituto Finlay de Vacunas y Abdala, del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB).
Por otro lado, Soberana 01, también del Finlay, ya mostró elevada seguridad en la fase I de sus ensayos y constituye un posible refuerzo ideal para inmunidad en convalecientes. La fase II/III de ensayos clínicos con este candidato está prevista a iniciar en el presente mes.
A fines de febrero, se prevé comenzar el ensayo clínico con ambas vacunas (Soberana 01 y 02) en la población pediátrica.
Mambisa, por su parte, único de los cuatro candidatos cubanos para administrar de forma nasal, también ha sido bien tolerado y mostró seguridad en las personas que lo recibieron durante la fase I de su ensayo clínico.
Autoridades de Cuba aseguraron que la industria biofarmacéutica de este país tiene capacidad tecnológica disponible para producir millones de dosis mensuales de sus futuras vacunas antiCovid-19 a fin de inmunizar a toda la población y satisfacer además las necesidades de otras naciones interesadas en el inyectable. (Cubasí – Reporte actualizado)
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