Silent Hill 2 Remake

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Incomprendido en su momento, venerado luego. De una recepción inicial moderada, a estar considerado entre los títulos más influyentes de todos los tiempos. Ese fue el camino que recorrió Silent Hill 2 desde que viera la luz el 24 de septiembre de 2001. Para quienes gustan conocer sobre la historia de los videojuegos, se trata del tipo de obra de la cual escuchas siempre hablar, al punto de llegar a conocer parte de su historia, escenas y personajes, pese a no haberla jugado ni un minuto.

Por lo antes expuesto, en 2022, la noticia de que Bloober Team le haría una nueva versión causó enormes revuelos en el sector, pues el estudio polaco atravesaba una crisis de reputación a causa de tres lanzamientos fallidos consecutivos:  Layers of Fear 2, Blair Witch (basado en el universo de la película El proyecto de la Bruja de Blair, de 1999) y The Medium.

Nadie entendía por qué Konami, empresa japonesa poseedora de los derechos de la saga Silent Hill, había decidido confiarle esa misión a Bloober Team. Semejante decisión —aseguraban los críticos— constituía otra prueba del pésimo uso que hacía la compañía nipona de dicha propiedad intelectual.

El proyecto pareció tocar fondo con el estreno de un tráiler repleto de acción desenfrenada, cuando el original era un juego de terror psicológico cargado de simbolismos.

Sin embargo, consiguieron enderezar el rumbo.

Las presentaciones posteriores del trabajo que estaban haciendo causaron impresiones cada vez más positivas. Y el 8 de octubre, día del estreno, cualquier duda restante quedó disipada. Silent Hill 2 Remake es, sin discusión, uno de los juegos imprescindibles de 2024, además de firme candidato a mejor remake creado hasta la fecha.

Desde los primeros pasos por las desérticas calles del pueblo que da título a la saga resulta evidente el nivel de dedicación invertido. Las sombras se alargan de manera inquietante, los sonidos retumban con claridad perturbadora, y la sensación de aislamiento traspasa la pantalla. La ambientación, aspecto clave del original, alcanza aquí niveles de excelencia superiores.

Lo mismo ocurre con la narrativa, principal pilar del material base.

La trama gira en torno a James Sunderland, un hombre viudo que acaba de recibir una carta de su difunta esposa Mary, quien dice estar esperándolo en Silent Hill. El lugar, como descubrimos posteriormente, representa para las personas que lo recorren la manifestación física de su subconsciente; el espacio donde toman forma tangible los pecados, traumas y deseos reprimidos que albergan. A eso responden los distintos monstruos de la obra: la enigmática María, el emblemático Pyramid Head, las enfermeras de sexualizado uniforme, las figuras humanoides atrapadas en camisas de fuerza hechas de carne…

Las complejidades del viaje de James hasta aceptar lo que pasó con Mary cuentan con mayor precisión dramatúrgica. Algo similar les sucede a los personajes: ya sea el atormentado protagonista, la inocente Laura, o Ángela y Eddie, quienes transitan en Silent Hill por sus respectivos infiernos (ella, víctima de abuso sexual; él, de bullying). Todos están mejor perfilados.

En líneas generales, Silent Hill 2 Remake potencia las virtudes del original a la par que corrige sus defectos (el combate pasa de muy malo a decente; no obstante, la cámara en tercera persona a menudo juega malas pasadas, y las peleas contra jefes siguen quedando a deber). Asimismo, sabe reinventarse en lo referido a la exploración. Mención especial merece el segmento en el Hospital Brookhaven, ejemplo perfecto de cómo diseñar un escenario de survival horror.

En la comparación entre las dos versiones ocurre lo esperado. La primera, pese a perder en el cara a cara, tiene a su favor ser una de las producciones claves para entender al videojuego como forma de expresión. La propia evolución del medio hace que la segunda lo tenga peor a la hora de trascender.

Más allá de esa comparación, resulta válido aclarar que estamos en presencia de experiencias complementarias. Bloober Team no desea reemplazar ni hacer olvidar al Silent Hill 2 de 2001; al contrario, cuanto busca es seguir dándolo a conocer. Pues, a nivel del universo que comparten, el Silent Hill 2 de 2024 no es un remake, sino una secuela.

Que las preguntas surgidas a raíz de esta afirmación sean el motivo perfecto para descubrir ambos juegos.

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