Oro verde de nombre pistacho
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El fruto seco conocido por pistacho, Pistacia vera, por su nombre científico, se plantó por primera vez en Asia occidental. Su cultivo se extendió al mundo mediterráneo pasando por lrán, donde ha sido una cosecha importante durante mucho tiempo.
Un manuscrito redactado por Anthimus, a principios del siglo VI d. C.,
“Acerca de la observación de los alimentos” indica que los pistachos eran bien conocidos en Europa hacia el final de los tiempos de la dominación romana. Más tarde se extendieron por todo el planeta.
Hoy se sabe que Pistacia vera, como también se le conoce, brinda importantes beneficios para la salud humana; y pese a la cantidad de nutrientes para el organismo, no es tan reconocido como otros, por eso resulta clave saber cómo aprovecharlos al máximo.
La botánica dice…
El Pistacia vera es una planta desértica y por esto tiene una alta tolerancia al suelo salino. Crece bien cuando se la irriga con agua que contiene 3000-4000 ppm de sales solubles. De acuerdo con informaciones son bastante resistentes bajo las condiciones correctas, y pueden sobrevivir en temperaturas que van desde –10 °C en invierno, hasta 40 °C en verano. Necesitan estar orientados hacia el sol y en suelo bien drenado.
El pistacho no se desarrolla bien en condiciones de alta humedad, sino que sus raíces pueden pudrirse durante el invierno si reciben demasiada agua y si el suelo no tiene suficiente drenaje libre. Se requieren largos veranos para la adecuada maduración del fruto. Las plantas son dioicas, tienen pies masculinos y femeninos separados. Las flores son apétalas y se reúnen en inflorescencias llamadas panículas (los conocidos popularmente racimos).
El fruto es una drupa que contiene una semilla alargada, que constituye la porción comestible. Está cubierto por una piel carnosa fina, de color verde. En su interior, bajo una cáscara dura y blanquecina, la semilla, de un color verde pálido (de ahí el epíteto de oro verde), está cubierta a su vez por una piel fina de tono malva y tiene un sabor característico. Comúnmente considerada como fruto, esta semilla es para uso culinario. Cuando madura, la piel cambia del verde a un amarillo rojizo otoñal y su cáscara se rompe y abre parcialmente, de manera abrupta. A esta apertura se le conoce como dehiscencia/eclosión y ocurre acompañada por un sonido audible.
Los árboles se plantan en huertos y necesitan de siete a diez años para lograr una producción considerable. La cosecha es alterna o bienal, lo cual significa que es más abundante cada dos años. El pico de la recolección se alcanza aproximadamente a los 20 años. Por lo general, a los árboles se les poda hasta un tamaño prudente para la mejor recogida.
Como dato curioso señalar que un árbol macho produce suficiente polen para que den frutos de ocho a doce árboles hembra. A menudo, la cosecha en los Estados Unidos se lleva a cabo mediante el uso de equipo para sacudir al árbol y hacer caer los frutos.
Beneficios para el hombre
Un artículo publicado en Wikipedia refiere que el estudio “Dieta basado en pistachos mejora los parámetros de función eréctil y los perfiles lipídicos en suero en pacientes con disfunción eréctil” argumentan y demuestran los beneficios del fruto en la fertilidad masculina.
Tal experiencia consistió en un ensayo clínico prospectivo en el que se incluyeron un total de 17 pacientes casados con disfunción eréctil (DE) durante al menos 12 meses. Los mismos recibieron una dieta de 100 gramos de pistachos durante tres semanas. Efectivamente se evidenció que la nutrición mejoró los puntajes IIEF (Índice Internacional de función eréctil) sin ningún efecto secundario asociado a hombres con DE. Además, los parámetros lipídicos mostraron mejoras estadísticamente significativas después del experimento.
El Pistacia vera resulta una fuente de grasas monoinsaturadas e insaturadas, las cuales ayudan a mantener unos niveles saludables de colesterol en sangre. Esto está directamente relacionado con la función eréctil debido a que para producir la erección es necesario que los vasos sanguíneos del pene estén saludables y tengan la capacidad de relajarse. El selenio es otra de las sustancias que se destacan en la composición del fruto en cuestión, debido a que favorece que se produzca la espermatogénesis sin trastorno alguno.
Según investigaciones publicadas por la Universidad de Cambridge que replica el sitio Agróptimum Minerales los pistachos son ricos en minerales, entre ellos, magnesio, manganeso, cobre, calcio, zinc y selenio.
Por otro lado, respecto a la presencia de vitaminas el espectro es muy amplio. Abarca las A, C, K y E hasta todas las variantes del preciado grupo B. Sobre este punto, se destaca el aporte de vitamina B1 (tiamina) y B6 (piridoxina).
Además, en el fruto se encuentran compuestos fenólicos, los flavonoides, los estilbenos, los ácidos fenólicos y las antocianinas conforman este ítem.Se trata de micronutrientes con grandes propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y cardioprotectoras.
En tanto, la luteína y la zeaxantina, dos carotenoides responsables del color de este fruto, poseen también propiedades antioxidantes.
Como el resto de los frutos secos, aporta fibra, elemento especial para la salud. Está comprobado que una porción de 28 gramos de pistacho puede proporcionar aproximadamente tres gramos de fibras.
Por último, y no menos importante, las proteínas son otro de los nutrientes esenciales comoquiera que investigaciones indican que aproximadamente el 20% del peso del pistacho está representado en el mismo.
Entonces, queda claro que este fruto seco es sumamente recomendable para sumar a la dieta diaria. Por tal motivo, investigaciones y expertos resaltan los puntos en los que consumir pistacho ayuda a la salud. Igualmente, debe tenerse en cuenta que el consumo de este alimento puede reducir el riesgo de diabetes.
Una investigación difundida en The Review of Diabetic Studies concluyó que la ingestión del fruto como bocado tiene un efecto positivo en el control del índice glucémico, la presión arterial, la obesidad y la inflamación en pacientes diabéticos. Al aportar fibra dietética, grasas saludables y antioxidantes, pueden contribuir a controlar los niveles altos de glucosa.
El pistacho se puede consumir crudo o como ingrediente de platos y postres. En el Uruguay, por ejemplo, es muy popular el helado con su fruto.
No obstante, siempre es importante consultar a un médico o nutricionista antes de tomar una decisión vinculada a la alimentación para tener una mirada profesional.
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