Mujeres de verde olivo en Cienfuegos
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“La participación de la mujer en la defensa de la Patria es una demostración de la elevación de su conciencia política”, señaló en una ocasión la Heroína de la República de Cuba y presidenta fundadora de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), Vilma Espín Guillois.
Tal convicción está indisolublemente arraigada desde hace mucho tiempo atrás cuando muchas de nuestras patriotas marcharon junto a sus esposos e hijos a la manigua redentora para conquistar, a filo de machete, la independencia de la tierra que las vio nacer. O más acá en épocas más recientes está el ejemplo del pelotón de Las Marianas en la Sierra Maestra, paladines contra la oprobiosa dictadura de Fulgencio Batista.
Las generaciones actuales de compatriotas se han nutrido de la misma savia histórica y así lo corrobaran las jóvenes cienfuegueras primer teniente Adis de las Mercedes Valdés Martín y la soldado Yudislaidy González Bécquer, ambas combatientes del Batallón de Tropas Especiales, de la Región Militar Cienfuegos.
“Siempre tuve un marcado interés en ingresar a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), así que una vez terminado el preuniversitario manifesté mi disposición de cursar la etapa de precadete en la Escuela Militar Camilo Cienfuegos, y más tarde egresé de la Academia Antonio Maceo, en la especialidad político-militar”, relata Adis.
Cuenta la joven oficial que su elección sobre este perfil tiene que ver mucho con su carácter y vocación de influir en la mente de los demás. “Es una labor bien compleja, admite, porque muchas veces tienes que lidiar tanto con jefes como subordinados testarudos. Entonces se trata de influir sobre la conciencia de los hombres, transformar pensamientos que no es sustituir una pieza por otra en el armamento… pero con paciencia, persuasión, inteligencia y perseverancia al final logras tu objetivo”.
Si bien la disciplina y el rigor de la vida militar imponen una buena cuota de abnegación, sacrificio y entrega, el puesto de la mujer en la primera trinchera de la defensa para Adis en el mismo existe pariedad entre los dos sexos en cuanto a la capacidad para un desempeño eficiente y el cumplimiento de cada una de las misiones. “Por supuesto, cuento con una retaguardia segura en mi familia, que me apoya y colabora en el cuidado de mi pequeña Alis.
El ingreso de Yudislaidy a las filas de la FAR fue por una vía diferente. Lo hizo a través del Servicio Militar Voluntario Femenino (SMVF), como una de las opciones de preparación y a la vez compromiso en su condición de integrante del Comité Provincial de la Unión de Jóvenes Comunistas, como cuadro profesional.
Dicen que vista hace fe y que la mejor manera de hacer trabajo político ideológico es predicar con el ejemplo; luego la experiencia personal de esta dirigente juvenil le permite hablar con propiedad de trasmitir a otras muchachas las oportunidades que brinda el SMVF para las jóvenes que optan por una carrera universitaria o la de hacerse oficial y permanecer en las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
“Estos meses que llevo de soldado en Tropas Especiales me ha aportado muchísimo, en tanto ha influido en la consolidación de valores como la disciplina, el compañerismo, la honestidad, el sentido de la responsabilidad y la solidaridad humana, entre otros, pero sobre todo el fomento del principio revolucionario asociado al sagrado deber de defender a la Patria y preservar las conquistas de la Revolución”, destacó.
Este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y mientras transcurre la última sesión del XI Congreso de la FMC en la capital del país, Adis y Yudislaidy son dos federadas que van a celebrar ambos acontecimientos desde las respectivas responsabilidades en la primera línea de combate, como las genuinas “marianas” de estos tiempos que son..
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