En Cienfuegos: Fiscalización y control a la comercialización de medicamentos

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El Programa Nacional de Medicamentos en Cuba tiene como premisa asegurar la disponibilidad de fármacos destinados a mantener la salud y calidad de vida del pueblo, así como desarrollar e introducir productos innovadores y tecnologías, que permitan el aumento de las exportaciones. Ante las carencias de medicinas, insumos y materias primas que necesita la industria farmacéutica cubana y la disminución del cuadro básico, se han trazado estrategias para la fiscalización y control de la producción, distribución y comercialización de estos.

A sabiendas de las dificultades creadas en las farmacias, allí donde se comercializan las medicinas, el Partido desarrolla un proceso de perfeccionamiento y mejora para hacer más justo el modo de adquirirlas, toda vez que la población envejecida es la que acude a tales establecimientos. Participan las autoridades de los barrios, los consejos populares, núcleos zonales, entre otros, trabajo del que se “levantan” las experiencias positivas y negativas.

Un encuentro para analizar la situación en torno a este asunto, reunió a  trabajadores vinculados al sector, presidido por la Dra. Margarita Rodríguez Monteagudo, funcionaria del Comité Central del Partido para la atención a la esfera de Salud; Adela Ruiz Villazón, miembro del Buró provincial para la esfera social; Dianelys Malagrida Terry, secretaria de la organización en el municipio de Cienfuegos, entre otros representantes de Salud y Encomed.

Invitados a la cita expusieron allí los criterios recogidos, como el expendio de los medicamentos por consultorios, la organización del orden para acceder a la farmacia, y la necesidad de frenar el expendio ilegal de fármacos por parte de individuos inescrupulosos, porque eso sería una “derrota para la Revolución”.

El proceso, que se lleva a cabo al unísono en todo país, no termina con este encuentro, que se realiza por municipios, sino que resulta continuo, en pos de encontrar una solución, aun en medio de la escasez y de un bloqueo económico y financiero de Estados Unidos contra Cuba, que impide el acceso a los grandes emporios farmacéuticos proveedores.

Una convocatoria del Minsap, reiterada por el Partido, llama a los trabajadores de las farmacias a ayudar a resolver los problemas, esclarecer dudas a la población y orientarla, y de esta manera, minimizar tanto como sea posible, las molestias del pueblo; resulta preciso observar la ética y las buenas prácticas en los establecimientos, porque una medicina es vital para las muchas maneras en que sanan y curan.

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