El romero estimula, revitaliza y regenera

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Con tan solo una ramita de romero en tus zapatos podemos proteger el hígado, combatir el cansancio mental, mejorar la circulación y la disgestión, además de aliviar los dolores de cabeza y otros trastornos físicos. Ello se explica porque el pie de las personas es un gran canalizador de energía, comoquiera que allí circula una gran cantidad de sangre que conectan con todos los órganos de nuestro cuerpo; y no se trata de nada místico, sostienen, más bien está relaciondo con nuestra disposición, fuerza de voluntad y predisposición vital.

De acuerdo con los especialistas esto forma parte de la técnica conocida por reflexología podal, cuya esencia consiste en una terapia muy amplia, con la que se puede tratar un gran universo de malestares del organismo humano. Estas son prácticas nada nuevas, pues en la historia de la humanidad resultan variadas y numerosas las evidencias de su uso desde tiempos remotos.

UNA PLANTA “TODO TERRENO”

Ahora bien, usted se preguntará por qué el romero. Se trata de una especie vegetal común en la península Ibérica y, en general, en toda la cuenca mediterránea. Se utiliza desde la antigüedad en la medicina tradicional, gracias a las múltiples propiedades que se le han atribuido históricamente. De todas, son sus aplicaciones externas las más populares. Sin embargo, el interés que despierta esta planta aromática en la actualidad radica en el potente efecto antioxidante de algunos de sus componentes.

A saber, los beneficios de este portento de la naturaleza se deben a sus múltiples principios activos que le otorgan propiedades curativas por sus efectos  antisépticos, antiespasmódicos, hepatoprotectores, antiinflamatorios, estimulantes y analgésicos, por mencionar los más reconocidos. Sin embargo, la actividad principal está íntimamente vinculada al sistema digestivo por estimular y favorecer las secreciones y la producción de jugos gastrointestinales.

De hecho, si se tiene en cuenta que los diterpenos que contiene el romero se biosintetizan en las plantas, como respuesta al estrés oxidativo, para ejercer un efecto protector de las membranas celulares de los vegetales, no es de extrañar que ejerzan un potente impacto antioxidante y captador de radicales libres.

De todos modos, se ha comprobado que tanto estos componentes aislados como los extractos de la droga poseen esta actividad. Además, se ha observado que inhiben la oxidación de las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y el envejecimiento de la piel causado por fenómenos de oxidación.

Estamos describiendo una planta perenne que pertenece a la familia de las labiadas (Labiatae). Este arbusto puede llegar a alcanzar un metro y medio de altura. Posee muchas hojas finas y unas flores que pueden ser azuladas, blanquecinas o rosáceas.

Tiene un sabor fuerte con aromas de alcanfor, pino, nuez moscada y lavanda. En el ámbito gastronómico, suele combinar bien con otras plantas aromáticas como el tomillo o el laurel. Es un condimento que potencia el sabor de los alimentos, por lo que es utilizado en guisos tradicionales de carnes, pescado pocos grasos y algunas verduras, también en adobos o en la preparación de encurtidos. Los principios activos se concentran en las hojas y, a veces, en la sumidad florida (flores).

Según creeencias ancestrales fue utilizada como una planta mágica para combatir la brujería, el mal ojo o quitar la envidia, así como también para purificar el ambiente de enfermedades como la peste negra. Asimismo la usaban en las bodas de la antigua Roma y Grecia para simbolizar el amor y la felicidad de la pareja, considerándola una hierba sagrada.

El Rosmarinus officinalis L,  por su nombre científico, se puede administrar internamente o de manera externa. La fracción que se aprovecha son las sumidades floridas y las hojas; con ellas se pueden hacer diferentes remedios destinados a ayudar o aliviar diversos problemas.En el mercado es posible encontrarla con presentaciones ya formuladas y destinadas a un tratamiento específico.

SI DE USOS SE TRATA…

Los abuelos aconsejan que el romero destinado a facilitar la digestión, flatulencias y mejorar la función biliar, debe emplearse como infusión, que es la forma más tradicional. Para ello mezcle de 2-4 g de hojas secas en 150 ml de agua hirviendo. Infusar de 10-15 minutos y filtrar. Tomar de dos a tres tazas al día, preferiblemente después de las comidas principales.

En cuando a la aplicación externa para cicatrizar heridas, antisépticos y analgésicos en dolores osteoarticulares y musculares, lo más recomendable es el aceite esencial,que se puede aplicar mediante un suave masaje sobre la zona afectada directamente o bien a través de un vehículo como aceite de oliva.

Por su lado, si requiere de baños de romero usados como antisépticos y antiinflamatorios, pues entonces hierba 50 g de hoja de romero en un litro de agua, deje reposar 30 minutos, colando y añadiéndolo a la bañera.También puede apelar a una disolución con alcohol, para tal fin mezclar 5 g de esencia de romero con 95 g de etanol 96º.

En forma de cocción, se prepara con 30-40 g de hojas secas por litro de agua, dejar hervir durante diez minutos y filtrar. Se puede aplicar en forma de compresas o fomentos sobre heridas o zonas doloridas por reumatismo o en fricciones sobre el cuero cabelludo, acción que, según la farmacopea popular, estimula el crecimiento, fortalece la raíz e impide la caída del pelo;¡ah!, y oscurece el cabello.

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