El logopeda: su acción en el habla y la comunicación

Compartir en

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 52 segundos

Por: Melissa Ojeda

La comunicación ha sido siempre un factor fundamental en las relaciones humanas, justo desde el momento en que se nace. Pero ¿cómo es esto posible? Pues, es importante saber que los niños antes de comenzar a hablar se comunican a través del llanto, balbuceos, gestos, expresiones faciales para manifestar así sus necesidades y emociones. A medida que van creciendo es aún más evidente su avance porque empiezan a imitar los sonidos y palabras que adquieren de su ambiente externo, hasta llegar a un mejor entendimiento de palabras y formar por sí mismos frases completas u oraciones.

A pesar de ser estas las etapas de desarrollo por las que deben atravesar los niños, muchas veces existen factores que intervienen en ellas, pero no de manera positiva. Y es que cada año el nivel de dificultades que presentan los infantes en su comunicación se hace más notorio, lo que les imposibilita expresar efectivamente lo que piensan, aprenden y sienten, fundamentalmente en las instituciones académicas.

Recordemos que la escuela, siendo uno de los principales agentes socializadores en la vida de los niños, es la encargada de su aprendizaje y educación. En este entorno no solo se adquieren conocimientos académicos, sino también se posibilita el desarrollo de habilidades sociales y emocionales que luego estarán reflejadas en su vida diaria. La situación aquí se encuentra en que, si el menor ya viene con estos problemas de comunicación, su recorrido en ella es muy complicado porque empiezan los problemas para relacionarse con otros de su edad y hacer amigos, realizar preguntas a sus profesores, seguir conversaciones, participar en actividades escolares, lo que puede causar sentimientos de frustración, tristeza y aislamiento.

Por suerte existe una disciplina encargada de brindar el tratamiento necesario para revertir estas dificultades. La logopedia engloba el estudio, la prevención, detección, diagnóstico y trastorno de comunicación humana y sus funciones asociadas. Cuando se habla del logopeda lo más habitual es pensar en esa persona que tiene como objetivo intervenir en las instituciones educativas para detectar desde edades tempranas los problemas en el leguaje que pueden tener los niños. Pero, su responsabilidad va más allá de enseñar a pronunciar correctamente ciertas letras, también brinda solución a las dificultades en la educación de preescolares y escolares que tienen trastornos de lenguaje y comunicación con: retraso mental, retardo en el desarrollo psíquico, trastornos generalizados del desarrollo, discapacidades visuales, auditivas, limitaciones físicos-motoras, entre otras.

Muchas veces esos estudiantes que presentan alguna complicación en su comportamiento y desarrollo lingüístico son dejados de lado por los mismos educadores que prefieren no complicarse con ellos y simplemente seguir con sus clases sin priorizar ningún tipo de tratamiento diferente para esa persona, provocando entonces un mayor retraso del aprendizaje. Es por ello que el logopeda debe ofrecer el tratamiento necesario que favorezca el desarrollo de ese alumno, así como la orientación a los profesores para mejorar su forma de enseñanza de manera tal que la información transmitida llegue por igual a todos sus educandos.

Y no solo eso, es importante que estos profesionales ofrezcan también asesoramiento a los padres, puesto que ellos juegan un papel esencial en la vida de sus niños. La orientación adecuada les permitirá un mejor conocimiento sobre las necesidades que tengan, y como apoyarlos de manera efectiva en el progreso que adquieran a través del desarrollo de actividades que fomenten sus habilidades comunicativas.

Visitas: 30

5 de Septiembre

El periódico de Cienfuegos. Fundado en 1980 y en la red desde Junio de 1998.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *