Difícil, pero no imposible

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El año 2022 ya forma parte indispensable de la historia del movimiento deportivo cienfueguero. No fue escenario de juegos multideportivos, esos donde los nuestros siempre suman al medallero de las legendarias delegaciones cubanas. Todo lo contrario, pues se trató del inicio de un atípico ciclo olímpico, que cerrará en 2024 con la celebración de la cita bajo los cinco aros en París, Francia.

Pero es que lo conseguido por atletas y entrenadores en este período cobra matices de hazaña, máxime si tenemos en cuenta que Cienfuegos clasifica entre las provincias más pequeñas del país, con bajo promedio de habitantes (y por ende de deportistas) según su extensión territorial, y con una pobre infraestructura en cuanto a instalaciones destinadas al deporte de Alto Rendimiento.

A esas históricas limitantes se enfrentaron los nuestros, que como todos sus homólogos del país venían de un período de par de años sin competencias oficiales y entrenamientos habituales debido a la pandemia de la Covid 19, por lo que los niveles de incertidumbre eran lógicos, y daban matices de drama en el retorno de las principales competencias: los Juegos Escolares, Juveniles y Pioneriles, indiscutibles baluartes del desarrollo deportivo de la Mayor de las Antillas.

Y llegó un cuarto escaño escolar que dejó boquiabiertos a todos, con un tercero por medallas que ratificó el asombro, con varios atletas cienfuegueros luciendo las coronas de reinas y reyes de sus respectivas disciplinas (atletismo, natación, tiro con arco, kárate, levantamiento de pesas, tenis de mesa, entre otros), y con técnicos recibiendo lauros como mejores entrenadores de sus deportes.

A ello se sumó el sexto lugar juvenil y también la sexta plaza entre los pioneriles, mientras que en la primera categoría finalizamos quintos, para merecer integralmente un puesto entre el quinteto de avanzada del país.

Un total de 28 nuevas promociones logró Cienfuegos a los centros nacionales, para elevar a 80 el número de atletas que forman parte de las canteras de los equipos cubanos.

Deportes simbólicos como el remo y el polo acuático ratificaron su valía, así como el patinaje, canotaje, esgrima y bádminton, que lograron mantenerse en el podio por territorios. Aquí destacar la actuación redonda del polo, que extendió a 23 su impresionante cadena de títulos nacionales en la primera categoría masculina, y saldó la deuda del sexo femenino, y de qué manera. 24 años después volverían las medallas para las polistas de Cienfuegos, y no solo las de bronce juveniles, sino el indiscutible cetro de las escolares, que literalmente barrieron a todas sus rivales.

Otros reverdecieron laureles, como es el caso del tiro con arco, el tenis de mesa y la gimnasia, reclamando los lugares que merecen, y otros, más allá de la plaza conseguida, mostraron serios avances, como el pentatlón, triatlón, voleibol, velas y lucha, por solo citar algunos.

Párrafo aparte para el atletismo y la natación. El primero con un histórico cuarto escalón, además de sumar a la mejor atleta de la competencia, y el segundo, también aplaudiendo Reina, con una cifra impresionante de 31 medallas que doblan las conseguidas en las anteriores versiones, a pesar de los encontronazos que sufre esa disciplina por la inestable situación de nuestras piscinas.

El boxeo, aunque no vivió su mejor momento en escolares y juveniles, sí lo hizo en la categoría social, con excelentes desempeños en el Campeonato Nacional por Equipos y el Torneo Playa Girón, donde Erislandy Álvarez sumó a su título el galardón como Más Técnico del evento. Precisamente casi al finalizar el año Álvarez, distinguido como el Novato de Cienfuegos en 2022, volvió a ser noticia junto a sus compañeros Erislán Romero y Saidel Horta, los tres dorados en la Copa Presidente de Kazajastán.

Parecido fue el panorama para el kárate, del cual se esperaba más en las tradicionales citas veraniegas, al margen de que Kevin Pérez León se alzó con el lauro de mejor atleta en deportes de combate. No obstante, los representantes de la Perla del Sur luego continuaron sumando lauros, en el XXX Campeonato Nacional de Shotokan y la reciente Copa Cardín, casi al finalizar el 2022.

También por debajo de los pronósticos quedaron el taekwondo y las pesas, teniendo en cuenta sus reales potencialidades. Sin embargo, los desempeños internacionales de Darío Navarro Riquelme, Marifelix Sarría y Elizabeht Reyes trajeron nuevas alegrías a esas disciplinas.

En sentido general todos los deportes aportaron lo suyo, y cabe resaltar que futbolistas y peloteros vieron interrumpidos sus eventos por motivos de presupuestos y logísticas, cuando venían rindiendo faenas que prometían podios, y que algunos no vieron actividad debido a los mismos recortes, y ahí Cienfuegos perdió claras opciones de medallas, sobre todo en los casos escolares del patinaje, bádminton y polo masculino.

Solo el judo, ubicado en el lugar 15, se encuentra rezagado. Y es cuestión urgente revisar estrategias y métodos, pues se trata de un deporte que mucho brillo le dio a la provincia durante décadas, por lo que el estancamiento duele de veras.

Para muchos la actuación de Cienfuegos es sorpresiva y costará mucho apenas acercarse a esos resultados en 2023. Es cierto que será complicado, y que el objetivo de superar la faena parece ilusorio. Pero aquellos que conocemos de cerca la extraordinaria fibra de la que están hechos nuestros atletas y entrenadores, confiamos en que irán siempre por la victoria, haciendo caso omiso a limitantes, barreras, absurdos y desaguisados. Sí, será difícil, pero jamás imposible.

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