Bonifacio y las papas “de altura”

Compartir en

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 50 segundos

Por reclamos de Bonifacio Labrada León, más de 2 mil 130 habitantes de la montaña en Cienfuegos volverán a comer papa cultivada en el macizo de Guamuhaya, luego de que hace casi siete años esta producción allí se esfumara sin explicación alguna para los guajiros.

“Insistimos en poder recuperarla, nos oyeron, y yo digo que por aburrimiento entregaron otra vez la papa”, aseveró el campesino, asociado a la Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA) 10 de Octubre, de la comunidad Sopapo-Cuatro Vientos.

“Hoy aquí en el valle intramontano de La Vega contamos con par de hectáreas (ha) del tubérculo, y dos más en tierras de El Mamey y El Naranjo. Por cómo se ve la plantación, pensamos que alcance para suministrar a los pobladores del lomerío: Cafetal, San Blas, Sabanita, Las Minas, Mayarí, Centro Cubano, Aguacate, Charco Azul y otros asentamientos.

“Para eso, solo necesitaríamos 10,6 toneladas (t) de papa, y si rinde 18 t por ha como estimamos, habrá para dar 10 libras por consumidor, y también entregar un poco más a los campesinos y cooperativistas”, comentó Bonifacio desde la experiencia acumulada durante 32 años de trabajo agrícola.

¿LLEGÓ PARA QUEDARSE LA PATATA?

Como agua que regresa a la tierra, la patata igual llegó para quedarse. Según Bonifacio, ahora comenzaron a buscarse en el Escambray otros lugares donde plantarla para el autoabastecimiento de la serranía en la región centro sur de Cuba.

“Es un cultivo noble y muy rápido, y acá todos los guajiros siempre produjeron papa desde la época de nuestros ancestros. Entonces, no se sembraba en los meses de frío, sino en mayo, con el objetivo de aprovechar las lluvias de la primavera en sitios altos donde ocurrían escurrimientos.

Siembra de papa en el valle intramontano de La Vega, en la comunidad Sopapo-Cuatro Vientos del lomerío sureño./Foto: Del autor

“La vianda alcanzaba para todo el mundo y era comercializada como el resto de las producciones agropecuarias. Después decidieron concentrar la siembra y cosecha del tubérculo en las grandes empresas y se lo quitaron a los montañeses”, relató el cooperativista de la CPA 10 de Octubre.

Pasó el tiempo hasta que, por iniciativa del fallecido Adolfo Rodríguez Nodals, quien dirigió el Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical, la papa volvió a las alturas del Guamuhaya en Cienfuegos y en sus suelos rindieron frutos nada menos que seis variedades.

“Él las trajo, una de semilla nacional y las otras cinco de importación. Observó cómo se comportaban y constató los favorables resultados. Así estuvimos cinco años cultivándola: abastecimos las bodegas y vendimos directamente a campesinos y pobladores. Luego del deceso de Adolfo, eso no continuó, y perdimos cuanto habíamos logrado”, agregó Bonifacio.

ENTRE PAPA Y JUBILACIÓN

Con 63 años curtidos bajo el sol y en la tierra, el veterano guajiro ya parece contar los días para jubilarse. Lo curioso es que la idea ronda su cabeza tras conseguir rescatar la siembra de papa en la montaña, hecho que muchos creyeron imposible.

“Al llegar el momento, me retiro físicamente de la CPA, no de la actividad agrícola. Tengo dos hectáreas de tierra para trabajarlas en mi vejez, producir para el barrio y garantizar la comida de la familia. Con las numerosas carencias que persisten —dijo Bonifacio—, no cabe sentarse a esperar que nos den algo; necesitamos aportar mientras existan fuerzas”.

Visitas: 111

Roberto Alfonso Lara

Licenciado en Periodismo. Máster en Ciencias de la Comunicación.

3 Comentarios en “Bonifacio y las papas “de altura”

  • el 11 marzo, 2024 a las 9:56 am
    Permalink

    Hombres como este son los que necesita el pais para salir de la situacion en que nos encontramos, felicidades y exitos para este campesino y que siga teniendo buenos resultados en sus cosechas.

    Respuesta
  • el 10 marzo, 2024 a las 11:52 am
    Permalink

    Excelente trabajo periodístico!!! Conozco a Bonifacio desde niña, MUYYYY buena persona y trabajador!!!

    Respuesta
    • el 14 marzo, 2024 a las 1:16 pm
      Permalink

      Maga, Boniacio es mi familia. Es de una rama cafetalera. Los Labrada siempre trabajando por el país.

      Respuesta

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *