Trasiegos al sur

Compartir en

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 35 segundos

El puerto de Cienfuegos figura entre los más importantes en el sur de Cuba. Cada año logra manipular un millón de toneladas de mercancías de importación, exportación y cabotaje. Tales operaciones no solo permiten el cumplimiento del plan de trasiego de cargas, sino además una mejora notable de los dividendos de los trabajadores.

“Esa estabilidad ha sido posible a partir del desarrollo de la tecnología portuaria, la cual con la incorporación reciente de montacargas, transbordadores, cargadores frontales y una amplia gama de técnica automotriz, ha permitido un aumento de la productividad”, indica Marino Rodríguez Cárdenas, director de la Empresa de Servicios Portuarios Centro (ESPC).

Sin embargo, no todo “viene por la canalita” y al deterioro progresivo y obsolescencia de muchos equipos y maquinarias, se enfrentan directamente los obreros.

“Mucho se construye por nuestros propios medios. Existe un cuerpo de innovadores y racionalizadores integrado por ingenieros, mecánicos, electricistas, soldadores, etc., con un sentido de pertenencia muy fuerte”.

El nivel de mantenimiento también posibilita mantener el buen estado en la capacidad operacional del puerto.

En las terminales se efectúan operaciones de carga y/o descarga de buques, entongue y desentongue, estiba y desestiba, recepción y entrega, agrupe y desagrupe, embalaje y pesaje.

Se brindan igual los servicios de atraque y desatraque de embarcaciones o medios de transporte marítimos, pase de muelles, servicios de almacenaje, depósitos y entrega de cargas, remociones y clasificaciones.

Andrés Díaz Guerrero, jefe del puesto de dirección de la Asociación Portuaria del Centro (ASPOR), indica que en estas operaciones resulta vital la Unidad de Servicios Técnicos quienes permitieron elevar en más de un 70 por ciento la disponibilidad técnica de varios equipos el año anterior.

La eficiencia de estos medios aseguró la rápida transportación de cerca de 140 mil toneladas de mercancías dentro del país, a partir de los servicios de cabotaje brindados, fundamentalmente, hacia la Isla de la Juventud y la región oriental.

“Hay una facilidad de operaciones entre estos puertos, y de navegación, que además del ahorro en el costo, enfoca hacia esta actividad el desarrollo de nuestros servicios”, indica Rodríguez Cárdenas.

A ambas zonas de Cuba se mueven principalmente materiales de la construcción y cemento, así como otros productos y alimentos, en menor cuantía.

La ESPC desarrolla también otras unidades de atraque en Ciego de Ávila, el puerto de Casilda en Sancti Spíritus, a fin de incrementar el crucerismo, y el de Isabela de Sagua al norte de Villa Clara, con vistas a los servicios de cabotaje.

Los ingresos logrados por los portuarios de Cienfuegos se deben también a los más de 200 buques operados, “en gran medida con pronto despacho, por las altas intensidades de manipulación de mercancías”, asegura Díaz Guerrero.

Indicó que los mayores volúmenes trasegados son de azúcar a granel, aunque también figuran productos como el maíz y la soya.

Casi el 50 por ciento de la exportación de la dulce gramínea sale por el puerto de Cienfuegos, donde se recibe cargamento desde Ciego de Ávila hasta Matanzas.

Aunque como en otros años, los altos niveles de Clinker hacia el exterior no sumaron ingresos al plan de 2015, fue posible con otros servicios, el cumplimiento de lo previsto.

En la docena de puntos de atraque se garantizó una utilidad neta de seis millones 550 mil pesos, lo que repercute en el ingreso de cada trabajador.

“A 907 pesos asciende el promedio salarial, —refiere el director— el cual todavía no es muy alto, pero se incrementó sustancialmente con relación a lo planificado dado la aplicación de la Resolución 17, y permitió además el aumento de la productividad”.

Sin embargo, el arribo masivo de buques y las limitaciones en espacio para operar varios al unísono, fue la principal limitación del calendario anterior.

“Entendemos la coyuntura internacional en la cual se realizan compras y el alto valor por cada flete, pero cuando se acumulan muchos barcos no podemos manipularlos, y es una pérdida para todos. No es un problema de esfuerzo sino más bien de capacidad”.

Aún así, los portuarios de Cienfuegos asumen también ahora el crucerismo, cuya actividad forma parte esencial en la economía de la empresa, y la cual deben recibir en el año en curso, más de medio centenar de tal tipo de navíos.

“Esto lleva un fuerte nivel de inversiones con vistas a ampliar las facilidades en la operación de las embarcaciones, y unida a ello se desarrolla el saneamiento de la Bahía, también una responsabilidad nuestra”.

El grupo Samarp se encarga de la recogida y disposición final de los desechos generados por la actividad marítima portuaria y de aquellas que sean peligrosas para el medio ecológico general.

Visitas: 54

Glenda Boza Ibarra

Periodista. Graduada en 2011 en la Universidad de Camagüey.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *