Los “jiles” hablan por César Prieto

Compartir en

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 6 segundos

Para algunos pudo pasar inadvertido, pero el hecho de que Rey Vicente Anglada sentara en la mesa de la rueda de prensa a su llegada al aeropuerto internacional Augusto César Sandino, de Managua, al primer abridor de la selección cubana, Lázaro Blanco, y al casi imberbe Cesar Prieto, puede leerse como que quien brillara 40 años en la defensa del segundo cojín de los equipos Cuba ve en el cienfueguero el futuro de esa posición en las escuadras de las cuatro letras.

Los box score del tope de cinco juegos contra los universitarios estadounidense confirman esa percepción, el manager cubano mantuvo todo el tiempo a César en la intermedia y como segundo madero y algo muy parecido sucedió antes durante la incursión por la Liga Canadiense-Americana (Can Am).

Una gran temporada coronada con la condición de Novato del Año y su rapidísima llegada a la selección nacional son las credenciales que muestran el salto de César a los planos estelares de la pelota criolla.

“Cierto he llegado bien rápido al equipo nacional y he tratado de adaptarme lo más pronto posible a  estas circunstancias, hasta ahora las cosas me están saliendo bien”, comentó recién llegado a la capital nica.

Camarero natural

Acerca de sus preferencias a la defensa del cuadro interior confirmó que su posición natural es la de camarero, pero en determinados momentos —como cuando jugó de refuerzo en Villa Clara—, le han encomendado las paradas cortas.

“Lo que hay es que seguir trabajando y mejorando en cualquiera de las dos posiciones”, apuntó el muchacho del batey Simpatía.

Sobre la reciente gira por los dos países más septentrionales de América, Prieto destacó su participación en la Liga Can Am, en la cual terminó como máximo cosechero de indiscutibles entre la tropilla cubana, con 19 pelotas a territorio de nadie.

Las hojas de anotación revelan que el actual ídolo del beisbol cienfueguero terminó con promedio al bate de .327, solo inferior al del antesalista avileño Raúl González, desbordado con .375.

“En esa competencia pude conectar con efectividad y me sentí en buena forma deportiva”, dijo quien heredó en su espalda el mítico número 6 glorificado en Cienfuegos y Cuba por el enorme Pedro José Rodríguez.

Inamovible aun en baja

Ante los universitarios estadounidenses no le fue bien y él lo reconoce. “Presentaron lanzadores de tremenda calidad con buenos rompimientos”.

En ese marco César ligó de 4-3 en el segundo juego, pero en los cuatro restantes se fue en blanco para promediar finalmente .167 (20-3).

Así y todo Anglada lo mantuvo en la alineación titular, algo parecido sucedió en Nicaragua, al salir al campo de primera instancia en dos de los tres partidos iniciales.

Como las historias se tejen de pequeños detalles, si alguien decide escribir la biografía de la joven promesa del beisbol cubano, apuntará que el picheo de Nicaragua estuvo a punto de dejar sin hits a Cuba la tarde-noche del sábado 13 de julio en el flamante Estadio Nacional, y que la hazaña fue quebrada por el bate de César Prieto, cuando en su único turno mandó una línea extraviada cerca de la raya del bosque izquierdo para apuntarse un doblete salvador del bochorno ofensivo.

La mini entrevista con el prospecto solo dio tiempo para un ajedrecístico rapid transit de dos jugadas.

¿Aspiraciones?

“Seguir esforzándome para mantenerme en el equipo Cuba, algo más difícil que llegar”,

¿Bateador o defensor?

“Mi principal arma es la ofensivo”, disparó el pelotero que desde sus inicios muestra un sello especial que lo identifica a la hora de pararse a la izquierda del pentágono blanco y empujar la bola hacia cualquier dirección del diamante, en ocasiones hasta más allá de los linderos del parque.

Lo confirma el hecho de que el madero sea su mejor manera de expresión, porque los “jiles” hablan por César Prieto.

Visitas: 802

Francisco G. Navarro

Periodista de Cienfuegos. Corresponsal de la agencia Prensa Latina.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *