Jorge Villazón, por las raíces del tiempo

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El 31 de marzo del año 1843, en tránsito hacia Cienfuegos, pernocta en la Taberna El sport, de Juan Blanco, el poeta mulato Gabriel de la Concepción Valdés, Plácido. El 31 de marzo de 1947, 104 años después, nace en San Fernando de Camarones, quien llegaría a ser  actor de Radio, Teatro, Cine y Televisión, Jorge Villazón Suárez.

En el año 1972, después de graduarse de actor, Jorge Villazón, comienza a trabajar en Radio Progreso, también en los teatros del ICR, que constituyeron un aporte al conocimiento de obras nacionales y universales y que por diferentes razones, desaparecieron de la pequeña pantalla.

Villazón alcanzó una gran popularidad con el personaje, El Halcón, que fue un verdadero boom, en el Programa de aventuras del Canal 6 de la Televisión Nacional. Sin embargo, el gran reto estaba por llegar. En febrero del  año 1986, bajo la dirección de Sergio Giral, se filma la película Plácido y es seleccionado para representar al Mártir de la Escalera. Villazón, según declaró, estudió toda la vida en el Peinetero y sobre él expresó: “… Plácido es un personaje que no se parece a ningún otro que yo haya protagonizado hasta ahora. Es real, un poeta, un hombre de otro siglo, una criatura sensible y sufrida…”.

San Fernando de Camarones le rindió tributo a la memoria de Plácido, a través de la versión cinematográfica, de Sergio Giral, y al papel  protagónico de Jorge Villazón. Francisco Otero Vázquez rememoró la estancia del Peinetero en la Taberna El Sport de Juan Blanco, aquel 31 de marzo de 1843:

Era un sitio familiar/ con clientes habituales/ de café, dulces locales/ y partidas de villar./ No existía otro lugar/ de tan alta distinción/ porque en una habitación/ hecha en el segundo piso/ durmió su sueño mestizo/ Gabriel de la Concepción. /La noche Camaronera/ en un parto de color/ le dio cobija y amor/ al mártir de la escalera./ Fue almohada y cabecera/ del ilustre forastero,/ y hoy, cuando pasa el viajero/ por la calle principal/ piensa en el triste final/ de Plácido el peinetero…”.

Al actor Jorge Villazón, humano y sensible, que se ha quedado a dormir, no en la Taberna de Juan Blanco, sino, en el corazón de su pueblo de Camarones, el mejor hospedaje y donde cada año se le recuerda con respeto y admiración.

Gracias a Raúl Cazorla Pérez, por incitarme a viajar por las raíces del tiempo.

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