Del gandul, más que el frijol

Compartir en

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 8 segundos

Con el desarrollo en Cuba del programa de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, proliferaron en el país numerosas especies vegetales, algunas ya conocidas por los cubanos, otras no tanto. Además de los organopónicos, huertos intensivos y parcelas, muchas familias fomentaron en patios y jardines hortalizas, plantas medicinales y condimentosas, y hasta algunas viandas como el plátano burro o granos como el gandul, con fines de autoconsumo en el hogar.

El nombre científico de esa popular leguminosa, Cajanuscajan, es más de abolengo que otra cosa; sin embargo, si lo llevamos al lenguaje coloquial de pueblo, podemos decir que estamos en presencia de un fruto que posee un alto valor nutritivo, por su apreciable contenido de proteínas, minerales, lisina, metionina, carbohidratos, vitaminas…, que puede consumirse tierno y seco, y goza de gran demanda internacional.

¿COMIDA O REMEDIO?

El frijol de palo, como también se le conoce a la leguminosa, tiene su origen en la India, donde se cultivó por mil años. Se sembró también en África oriental y llegó a América con el comercio de esclavos africanos. Se le llama gandul, guandú, frijolillo o quinchoncho, en dependencia de la región donde se cultive.

Las maneras de consumir este alimento pueden ser en forma de granos cocidos, guisos, arroces y dulces, representando una fuente económica de proteínas, carbohidratos, fibra dietética, minerales y vitaminas, principalmente las del grupo de las B. En la gastronomía panameña, por ejemplo, de acuerdo con el sitio web saludpanama.com, el guandú se utiliza como parte de las comidas típicas.

El Cajanuscajan resulta muy parecido al guisante; es como un chícharo o alubia y pertenece a la familia de la fabaceae. Hay dos tipos principales de gandules, uno con flores amarillas y vainas cortas y otro con vainas más largas y flores amarillas y rojas, o moradas. El arbusto llega a alcanzar hasta 5 metros de altura, y sus hojas trifoliadas son perennes. Debe mencionarse que entre las ventajas está que es un cultivo resistente a la sequía y capaz de crecer en suelos ácidos y pobres.

Entre sus características beneficiosas, se encuentran la de ser una planta con capacidad de fijar una elevada cantidad de nitrógeno en el suelo y que por su alto contenido de proteínas, representa un excelente sustituto de la carne. Tiene entre 18 y 25 por ciento de proteínas y un elevado contenido de lisina y metionina, potasio, magnesio, calcio, hierro y fósforo.

Si el guandú a cocinar es natural, luego de limpiarlos y lavarlos, conviene que se los guarde en un envase seco y bien cerrado. Si lo que se prefiere es comprarlo enlatados, es prudente que los limpie debidamente y que los guarde evitando que entren en contacto con altas temperaturas o con la humedad.

Ahora bien, además de sus cualidades alimenticias, el quinchoncho está en la lista de la farmacopea popular dadas sus propiedades medicinales cuyos efectos más reconocidos destacan el de ser antirreumáticas, diuréticas, hemostáticas y astringentes. Las flores y brotes jóvenes se emplean para afecciones bronquiales y pulmonares. En tanto, las hojas, en cocción, suelen aplicarse para lavar llagas, heridas, irritaciones de la piel, sarna y picazón.

Investigaciones de tesis en Cuba dan cuenta de que la terapéutica rectora en el tratamiento usado por medicina natural y tradicional, como modalidad de la fitoterapia, entonces, recomiendan baños de infusión de frijol de gandul en caso de quemaduras, por su alta efectividad en ese tipo de lesión en la piel.

En otro orden, las semillas sirven como pienso para el ganado, pueden constituir el 30 por ciento de la dieta de aves, y sus ramas y vainas tiernas son excelente forraje, para lo cual permite tres cortes al año. Además, las flores de esta planta atraen insectos polinizadores, como las abejas. Cuando los pétalos caen al suelo, aportan gran cantidad de materia orgánica y una vez que el arbusto se seca aporta una muy buena madera para cocinar.

Visitas: 269

Armando Sáez Chávez

Periodista de la Editora 5 de Septiembre, Cienfuegos, Licenciado en Español y Literatura y Máster en Ciencias de la Educación

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *