La loción desinfectante y el cloro: las peras al olmo

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La Covid-19 ancló en esta provincia marinera y dejó que el mar batiera sobre su barca. Luego saltó a tierra y dispersó sus cinco cepas por el territorio como si fueran las tropas de Napoleón Bonaparte que pisaban suelo francés después de escapar de aquella isla con nombre de mujer (Elba), con obstinación y complicidad.

Desde mayo pasado la meseta epidemiológica que había sido puntal de Cienfuegos, por casi un año de pandemia en Cuba, comenzó a desmoronarse sin que remedios o curitas protectoras pudieran impedirlo. Y los números de positivos en 24 horas pasaron de azul a rojo intenso, de normal a elevadísimos, de control de foco a transmisión comunitaria. La gente empezó a sentir síntomas de hoy para mañana y los hospitales a recibir más de lo previsto, de lo imaginado.

Una situación sanitaria difícil se posó en la provincia y las noticias de que familiares, amigos y vecinos eran hospitalizados por formas moderadas o graves de la enfermedad e incluso morían tras haberse contagiado con el virus del SARS-CoV-2 dejaron de ser foráneas para convertirse en autóctonas.

Todo ello sin cloro ni gel antibacterial a la venta en las unidades comerciales de la provincia. ¿Cómo enfrentar a un virus letal si carecemos del acceso a estos insumos para el manejo de la higiene doméstica y estatal? ¿Por qué no hay cuando más falta nos hace?

“Para satisfacer la demanda de la loción antibacterial ALCO-D que produce nuestra empresa cienfueguera necesitamos cuatro pailas de 12 mil litros de alcohol por lo menos y no hay ni para empezar. Ya consumimos todo los volúmenes asignados para el año y no ha existido modo de que entre más materia prima…”, dijo a la prensa Ratmar Fogoso García, director de operaciones de la Empresa Química de Cienfuegos, la cual produce ese líquido azulado de tan alta calidad para enfrentar la pandemia.

“Ya se habla del retorno de los niños a las escuelas y estoy muy preocupada porque mis hijos son alérgicos al cloro, y dónde se puede comprar gel antibacterial para que lleven en sus mochilas. ¿En Facebook? ¿Vía WhatsApp? En las redes sociales un pomito de los pequeños cuesta 150 pesos cuando lo encuentras (…)  No es un secreto que a veces falta el agua en los centros educacionales para el lavado de las manos (…)”, explicó Rosaida Gómez Pérez, madre que reside en el Centro Histórico Urbano.

Según refirieron directivos de la Empresa Química de Cienfuegos, hace dos meses aproximadamente que no salen para el mercado interno los pomos de un litro de ALCO-D; tampoco se ha expendido la legía (en pequeños o grandes formatos), porque la industria productora de cloro en Sagua la Grande había estado fuera de servicio.

“Ya comenzamos a recibir el cloro, pero ahora existe déficit de los envases, y ante esa situación   solo nos queda venderlo a granel en las unidades de Comercio”, explicó Fogoso García.

El Grupo Empresarial Azucarero (Azcuba) tiene bajo su contenido de trabajo generar este año unos 140 mil litros de alcohol-gel, desinfectante y antibacteriano de elaboración nacional, de acuerdo con reportes de Prensa Latina. Sin embargo, ello no respalda la alta demanda en tiempos de epidemia y quedamos a la espera de otras alternativas que suplan el déficit.

Antes, el país había sido noticia por ser gran productor de alcohol, ya que la caña ha signado nuestra historia económica, pero ello se ha diluido a través del tiempo como mismo ha pasado con la industria azucarera. La acumulación de problemas técnicos en el sector e ineficiencias en las áreas de cultivo nos dejan un dibujo marchito en lo que fuimos lo mejor del mundo.

Muchas justificaciones objetivas y subjetivas envuelven al déficit de gel antibacterial y cloro en la provincia. No obstante, la realidad es que ninguna devuelve la tranquilidad de tener acceso a insumos que garantizan la higiene personal y doméstica en tiempos donde la pandemia roba vidas. Entonces habrá que buscar soluciones, porque ese es el papel de quienes dirigen procesos y administran las cuentas gubernamentales, así sin medias tintas.

Con la propagación de la Covid-19 en el mundo, el uso del gel antibacterial tomó mucha más fuerza de la que poseía al ser la solución higiénica más efectiva después del lavado de las manos con agua y abundante jabón. De igual modo el cloro anda entre las artillerías de mayor alcance contra el nuevo coronavirus…, y ante el desembarco de las cepas más fuertes y contagiosas a este territorio marinero, se dejan esos nichos vacíos, al desnudo diría yo.

Napoleón perdió en Waterloo y se tragó con ello su obstinación, pero su huella fue mucho más profunda de lo que se creía. El SARS-CoV-2 también nos deja un tatuaje grande, que dolió en cada pinchazo; para enfrentarlo habrá que cubrir todas las retaguardias, porque en ello va la vida.

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Zulariam Pérez Martí

Periodista graduada en la Universidad Marta Abreu de Las Villas.

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