Fotorreportaje: La conquista de la doncella
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Del Pan de Matanzas se dice que es una mujer dormida, cuyo cuerpo se alza hasta los 382 metros sobre el nivel del mar, a la vista de quienes llegan a esos hermosos parajes de la costa norte de Cuba, como lo hiciera Sebastián de Ocampo hace más de 500 años.
Precisamente contra el dorso de la doncella matancera “chocaron” varios de los integrantes del grupo excursionista La Viña el pasado mes de abril, demostrando una vez más que “explorar” el cuerpo de una mujer puede convertirse en la más osada e intrépida de las aventuras jamás vivida.
Así pues, lo que en un inicio parecía un ascenso medianamente fácil desde el espejo del vecino embalse Caunavaco, se transformó de súbito en un calvario por culpa de un error de orientación sobre el terreno. La equivocación casi les cuesta tener que pernoctar en uno de aquellos riscos, cual si fueran gigantescas e impenetrables costillas en la oscuridad. Por suerte, gracias a la solidaridad del equipo y la tenacidad de otros miembros que ya habían llegado a la cima por el camino oficial, se pudo solventar aquel trance al caer la noche. El objetivo se logró con creces e incluso superó las expectativas. Más allá de la aurora incomparablemente bella del día 21 de abril, observada desde la cúspide, se fortaleció la huella y el sentimiento colectivo, tan necesarios cuando se realizan estas lides en medio de la naturaleza.
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Los extraño tanto y en pocas palabras narraste las peripecias que suceden en un viaje de “La viña” que quien los ha vivido sabe lo que encierran esas sutiles palabras y las leves equivocaciones de nuestro querido amigo jjj,los quiero tanto a todos y los extraño en gran manera.
La viña en el corazón 💚
¡Y nosotros a ti, Eli! Te mando un beso y un abrazo en nombre de todos.
Nos vemos en la próxima aventura.
Preciosa descripción del viaje
Ojalá que pronto vuelva a repetirse, Gabriel. 🤜🤛🤗