“Viaje a la semilla” en Cienfuegos (+Fotos)
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Aseguran los especialistas que hasta el 50 por ciento de los rendimientos agrícolas dependen de la calidad de la simiente. A tono con ese presupuesto, los trabajadores de la Finca Provincial de Semilla, enclavada en el municipio de Abreus, aplican consecuentemente la ciencia y la técnica y otros requerimientos agrónomos, a fin de garantizar los amplios programas de siembra en Cienfuegos.
“Hasta el 31 de agosto, cuando cierra la campaña de primavera, debemos plantar no menos de 33 mil 250 hectáreas en los principales polos agrícolas y áreas de otras formas productivas de los autoabastecimientos municipales, cifra sin precedente para la etapa”, precisa Jesús Negrín Capote, subdelegado del Área Funcional Agrícola de la Delegación Provincial de la Agricultura en Cienfuegos.
Por supuesto, acometer tarea de tamaña envergadura, además de la preparación de las tierras, muchas de ellas rescatadas del marabú, requiere del aseguramiento de semilla de calidad, capaz de multiplicar los rendimientos en el surco.
De ello está consciente el experimentado finquero Antonio Machado Verdecia, un manzanillero aplatanado, literalmente hablando, en los campos de Yaguaramas. “Hoy tenemos sembradas seis variedades de boniato, además de maíz, yuca y plátano, todos de un alto potencial genético”, explica mientras muestra satisfecho el fruto de su trabajo.
El labriego, con nombre de poeta y alma de agricultor, agrega que cuando comenzó a cultivar la tierra hace ya un cuarto de siglo, estaba muy lejos de avizorar cuánto podría aprender de variedades, clones y atenciones culturales, producto de la permante capacitación teórica y práctica, a cargo de especialistas del Instituto Nacional de Investigaciones de Viandas Tropicales (Inivit).
A esos propios reclamos responde el boyero Carlos Bonilla Montero, solo que: “mi tarea fundamental, dice, es hacer parir la tierra con el concurso de mis fieles Jovellanos y Ojinegro, los inseperables bueyes de yunta que rinden por 20 hombres y ahorran al país combustible y otros gastos”.
Al decir de Oxiel Moreno Rumbaut, director de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Semillas Cienfuegos, el objeto social tanto de la finca, como de la planta de beneficio y la biofábrica de vitroplantas, consiste en garantizar la simiente agámica, botánica y biotecnológica registrada a todas las fincas municipales de semillasy polos del sistema de Agricultura en la provincia y a otros organismos como AzCuba.
En esta brigada de producción contamos con un colectivo muy experimentado, subraya, y ahora mismo hemos intensificado la siembra, en áreas y variedades de semilla, a fin de dar respuesta a los intensos planes de la provincia, incluyendo el rescate del frijol caupí, tras la afectación de la plaga del Thrip de la flor”.
Agrega el directivo que la introducción del girasol responde al interés de la Agricultura por fomentar el desarrollo de la oleaginosa en la producción de aceite y forraje para alimento animal en la ganadería. “Por lo pronto, acota, ya pueden verse las plantaciones florecidas con cinco híbridos diferentes,cuyo cultivo es asesorado por especialistas españoles”.
En el combate diario contra las plagas y enfermedades se destaca Rolando Ramos Sánchez, quien desde su desempeño de técnico en Gestión de la Calidad y Sanidad Vegetal, se erige máximo responsable en mantener los cultivos libres de esos patógenos.
“Luego, comenta, es preciso un buen control fitosanitario a partir de muestreos sistemáticos. Si bien las limititaciones de pesticidas, insecticidas y otros productos químicos de importación afectan, hemos apelado al empleo de medios biológicos como el Trichogramas (huevos), Tetraticho (larva) y la Beauveria bassiana para combatir el tetuán del boniato, además de barreras vivas a modo de hospederos de biorreguladores”.
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Por su lado, Alberto Díaz Moreno, jefe de la finca, tiene palabras elogiosas para los 58 trabajadores del colectivo, sobre todo de las cuatro compañeras que comparten, a la par de los hombres, las tareas agrícolas.
“Gracias a la constancia, preparación y entrega, habitualmente cumplimos con nuestros compromisos y lo seguiremos haciendo con la misma eficiencia, ya sea la semilla o la entrega del subproducto a Acopio para su comercialización a la red de mercados, más en estos tiempos cuando la pandemia por el coronavirus obliga a incrementar la producción de alimentos para el pueblo, buscar nuevos rubros exportables y sustituir importaciones”, asegura.
Lo que fue en su momento el autoconsumo del otrora Complejo Agroindustrial Guillermo Moncada, de Abreus, cuenta con tierras muy fértiles, clasificadas en suelos negros y pardos rojos, todos beneficiados con riego por aniego. “Hoy requerimos de mejores sistemas de irrigación (se piensa en enrolladores), pues tantos años de explotación por ese antiguo método degrada la superficie”, observa Díaz Moreno.
A ojos vistas, la Finca Provincial de Semillas no solo se ha convertido en un polígono experimental para multiplicar simientes de categoría. Resulta también el proceso de gestación, cuyo parto proyecta al futuro, de ahí que, como le escuché decir al joven Eddy González López, “somos como un buen híbrido entre las nuevas y viejas generaciones de agricultores”.
Entonces, no pude sustraerme de evocar en mi mente el famoso libro de nuestro Alejo Carpentier: Viaje a la semilla.
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