Trucos para hacer tus propios fertiliizantes en casa

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Como seres vivos que son, las plantas, al igual que los animales, necesitan alimentarse de los nutrientes necesarios para su desarrollo y crecimiento. Es un hecho que, al menos en Cuba, sean más los adeptos a sembrar flores, vegetales y hortalizas en huertos, parcelas, jardinesm patios e incluso hacerlo en macetas distribuidas en balcones, terrazas y hasta en techos. A propósito, en la mayor de las Antillas se ha fomentado un amplio movmiento popular, promovido por los Comité de Defensa de la Revolución con el sugerente nombre de “Cultiva tu pedacito”.

Ahora bien, no siempre tenemos a la mano los fertilizantes de factura industrial, la mayoría fabricados con productos químicos. Sin embargo, muchas veces, por desconocimiento, fundamentalmente, nos redean en el hogar recursos naturales que echamos a la basura, sim saber que constituyen poderosos abonos orgánicos y naturales para obtener cultivos mucho más saludables y con prácticas agroecológicas.

Manos a la obra para obtener abonos naturales

Las cáscaras de huevo, por ejemplo, nos ayudan en el huerto  a aportar el calcio que necesitan las plantas. Si bien, en primera instancia no es asimilable por las especies vegetales, en el futuro si lo será, por lo tanto es interesante de vez en cuando aportar esas envolturas calcáreas. Uno de los abonos caseros para plantas más sencillos y efectivos.

La ceniza de nuestras barbacoas también pueden servirnos como abonos caseros para aportar nutrientes en la huerta. Eso sí, en general el carboncillo de leña contiene mucho calcio y potasio, y también sílice, magnesio, fósforo, algo de azufre y muy poco nitrógeno. Si quisiéramos agregar fósforo en mayor medida deberíamos quemar también unos cuantos huesos de animal. Esa ceniza contendría un 16% de fósforo.

Sepa que el humus de lombriz es uno de los fertilizantes más completos y equilibrados que podemos aportar a nuestros cultivos. ¿Por qué son tan buenas las lombrices? Piensa en ellos como un fertilizante de liberación lenta totalmente natural que no quemará ni las plantas más tiernas, ayuda a airear el suelo, mejora la estructura general del suelo, retiene la humedad y puede detener a los pulgones y a los ácaros antes de que se conviertan en un problema.Y, al igual que el compost normal, los excrementos de lombriz hacen un excelente té líquido del anélido.

En cuanto al compost con cascara y residuos de vegetales, además de ser super sencillo de prepararlo y no requiere mucho esfuerzo, tiene la ventaja de que lo haremos con nuestros propios residuos vegetales. De manera tal que evitaremos contaminar y tirarlos a la basura. Estimula la vida biológica del suelo, aumenta la capacidad de retención de agua y nutrientes, por su parte, favorece la germinación de las semillas yestimula el crecimiento de las raíces.

Si además de hacer el humus, que lo usaremos para preparar nuestros sustratos de maceta o de huerto, realizamos también el humus líquido de lombriz, podremos usarlo para el riego de nuestras plantas de manera foliar. De esta manera estaremos aportándoles con este fertilizante ecológico y en forma de riego, una gran cantidad de nutrientes extras y asimilables a las plantas.

Estos abonos ecológicos los podremos confeccionar en cualquier sitio, incluso si no tenemos ni jardín ni huerto. Pero si además podemos o tenemos cierto espacio, podremos realizar de forma sencilla otros tipos de ​​abono natural para plantas igual de completos que nos ayudarán a tener unas plantas más saludables.

El abono verde es un curioso pero muy efectivo recurso ecológico, pues en realidad se trata de sembrar plantas que nos ayudan a fijar el nitrógeno y de paso tenemos la huerta ocupada. Una muy interesante forma de abonar.

Y para que vea, si además de los canteros, tenemos gallinas u otro tipo de aves, podemos emplear este interesante abono natural, conocido por gallinaza, para plantas. El modo más común es el té de compost en forma de riego, aunque lo bueno de este abono es que es un completo fertilizante ecológico que nos añade nitrógeno al suelo, uno de los nutrientes más importantes para la salud y el desarrollo de las plantas.

Este abono natural es realmente uno de los mejores, junto al humus de lombriz, pero también es cierto que es el más complejo a la hora de conseguir los materiales. Si puedes hacerlo sería genial, pues enseguida notarás una mejoría muy completa en el suelo y en la vida del huerto. Uno de los abonos caseros para plantas más potentes y un aporte súper completo de nutrientes y además nos ayuda de forma notable a mejorar su estructura.

Empero, la gallinaza no es el único recurso natural. También estiércol de cabras, conejos, vacunos y equinos pueden ser de mucha utilidad. Las heces de los dos primeros son los que tienen la tasa más alta de nitrógeno y pueden ser utilizadas directamente en la tierra. Los de otros animales, en general, deben estar bien tratados antes en forma de compostaje.

Aunque privado a la vista, el Mycorrhizae nos proporciona enormes beneficios a las plantaciones. Es verdad que estos hongos microscópicos no son técnicamente un fertilizante, pero sí desempeñan un gran papel en la salud de las plantas. Estos interesantes microrganismos se adhieren a las raíces de tu planta, aumentando su superficie, lo que mejora su resistencia ante la sequía y su capacidad de absorber nutrientes.

Las micorrizas incluso ayudan a descomponer los nutrientes que ya están en el suelo, facilitando su síntesis por parte de las plantas. Amén de que puedes añadir a tu sustrato inoculantes de micorrizas disponibles en el mercado, y muchos de nosotros lo hacemos, una de las mejores formas de aprovechar las ventajas de estos útiles hongos es cultivar un jardín sin excavar. Esos diminutos seresya están presentes en el suelo como parte del microbioma bajo nuestros pies. Luego, si labramos o excavamos el jardín, destruimos esta enorme y delicada red. Y lo que tardó décadas en formarse tiene que volver a empezar.

Por último, aconsejarle confeccionar harina de huesos, un ingrediente que proporciona mucho fósforo a las plantas, por lo que es un gran abono para cualquiera de ellas y en particular para los bulbos en flor. Hay algo de nitrógeno natural en ese polvo, pero es una cantidad mínima. Sin embargo, muchas mezclas de harina de huesos producidas comercialmente tendrán nitrógeno. La forma más fácil de añadirla a la tierra es poner un poco en el fondo de cada agujero que hagas antes de sembar uno de tus semilleros en primavera.

Por supuesto, estos son los abonos naturales más comunes y de fácil adquisición, pero existen otros que podrían ser magníficos aliados en tu función de agricultutor doméstico.

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Armando Sáez Chávez

Periodista de la Editora 5 de Septiembre, Cienfuegos, Licenciado en Español y Literatura y Máster en Ciencias de la Educación

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