Radio Cubana: cultura, entretenimiento, participación

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Onelio Castillo Corderí, director general de la Radio Cubana, afirmó que “no se puede entender la lógica del trabajo de la Radio Cubana durante el verano, que ya sería en franca recuperación pos-COVID-19, si nosotros no hacemos una valoración de lo que estamos proyectando con todo lo que hemos vivido en estos más de 100 días de intenso trabajo”.

Uno de los elementos que tipifican toda la labor de la radio durante la etapa de enfrentamiento y control de la COVID-19, ha sido “la vitalidad y la unidad del sistema, con sus 100 emisoras. Desde Radio Habana Cuba, nuestra estación de onda corta, con un inestimable servicio de información hacia el exterior, hasta las 74 emisoras municipales, las de mayor vocación comunitaria”.

Eso se sintetiza hoy, por ejemplo, “en que llegamos a este momento con más de 2.1 millones de trabajos y de acciones comunicativas en todo el país, con un crecimiento creativo en los modos de hacer, con transformaciones numerosas en las emisoras. Más del 70% del tiempo de transmisión de un día del sistema de la radio cubana (unas 1 000 horas de transmisión de un total de 1 400) ha tenido un cambio totalmente renovador durante esta contingencia epidemiológica”.

Castillo Corderí destacó un ejercicio superior de retroalimentación, “que ha bebido mucho de la sabiduría de nuestras audiencias. Las opiniones respetuosas, certeras y sensatas de los oyentes han contribuido a que hayamos modificado e introducidos temáticas que son muy importantes en la programación de la Radio Cubana”.

Los intereses de las audiencias, recogidos en encuestas, apuntan a mantener la presencia sistemática en espacios radiales de psicólogos, epidemiólogos y otros especialistas de la salud, así como de los directivos de los distintos sectores y las autoridades del PCC y el Gobierno.

También se aprecia el interés por que continúe la programación en vivo, con espacios dinámicos, de más duración, que contengan boletines de noticias, entradas de periodistas en directo, mayor participación, trabajos informativos y buena música.

Además, que no se eliminen los encadenamientos nacionales y provinciales, y se mantenga el espacio Todos por Cuba. Además, que se incremente la información sobre el enfrentamiento a las indisciplinas e ilegalidades.

“Si nuestro pueblo está pidiendo todo esto, que se mantenga el aporte a las emisoras nacionales desde cada rincón del país, que se mantenga una programación más viva, con más información y entretenimiento, eso es lo que le ofreceremos durante la etapa del verano”, dijo el director general de la Radio Cubana.

Durante el cercano verano 2020, los ejes principales de la programación radial serán la información y la orientación, la función cultural, el entretenimiento y la participación de las audiencias.

“Estaremos reflejando todo lo que acontece en el país en la etapa de recuperación pos-COVID-19, tomando en cuenta la gradualidad y asimetría con que ha concebido y trabajado el país este proceso, el cumplimiento de los protocolos sanitarios, la orientación de bien público al pueblo, las normas de comportamiento necesarias para evitar rebrotes, el impulso a la economía, el ahorro y la responsabilidad social”, afirmó.

En cuanto a las actividades del verano, desde el plan concebido nacionalmente hasta los barrios y comunidades. “En esta ocasión, quizá como nunca antes, el verano implicará la integración de todas las instituciones y el pueblo cubano, y nosotros estaremos acompañando los esfuerzos conjuntos del Ministerio de Cultura, las galerías de arte, el Inder, de Educación, de la Unión de Jóvenes Comunistas, de los Joven Club de Computación, de las organizaciones de masas y estudiantiles”.

Sobre la función cultural, Castillo Corderí señaló que tendrá como plataforma principal la programación dramatizada, tanto de archivo como de estreno (novelas originales cubanas, novelas adaptadas, series policíacas).

Radio Arte entrega históricos dedicados a Abel, Melba, Haydée y Celia, uno sobre la épica del 26 de Julio y, como homenaje a Félix B. Caignet, la reposición de una versión de su clásico El derecho de nacer realizada en Radio Arte en la década de 1980.

La propuesta comprende títulos de Joaquín Cuartas, obras donde intervino Rosita Fornés y una serie hecha “desde casa” por el Grupo Dramático de Cadena Agramonte, inspirada en la figura de Aurelia Castillo.

También, la retransmisión del bloque de dramatizados de Radio Progreso en su programación de madrugada, coproducciones con la Uneac en CMBF, de Villa Clara, Guantánamo y otras provincias, y la socialización en todo el sistema radial de un grupo de obras patrimoniales que están en el valioso archivo sonoro de Radio Habana Cuba.

Un espacio principal tendrá el entretenimiento, “y dentro de este la carta de triunfo de la Radio Cubana, su difusión musical, que seguirá en función de un mayor nivel estético, mayor diversidad y el reflejo de lo autóctono y el valor de lo musical y de la cultura que se cultiva en los municipios y provincias del país”.

Habrá programación humorística, incluidas reposiciones de Alegrías de sobremesa en Radio Progreso y algunas propuestas de emisoras provinciales y municipales.

En cuanto a la participación, el director general de la Radio Cubana informó que están previstos programas de participación (concursos, juegos, ejercicios físicos, espacios y variedades para niños y los adultos mayores). En esta área, dijo, persiste la deuda con los segmentos de público compuestos por adolescentes y jóvenes.

Asimismo, mencionó espacios donde las audiencias toman parte en la construcción de los contenidos y les dan forma, las transmisiones desde exteriores con el cumplimiento de los requerimientos higiénico-sanitarios de la etapa (en centros recreativos, colectivos laborales, comunidades), y la celebración del cumpleaños 98 de la Radio Cubana.

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