Pesquisa activa, vista hace fe (+Infografía)

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“Los cambios en los patrones epidemiológicos y sociales en Cuba, así como el fortalecimiento de la Atención Primaria de Salud, son las premisas fundamentales para establecer programas de intervención en las principales causas de morbilidad y mortalidad en el país, teniendo que implementar diferentes funciones a nivel local, organizados en grupos de trabajo y liderados por los equipos básicos de Salud.

“Existe una expresa voluntad y decisión política de Gobierno, de no solo acompañar, sino de liderar este proceso de transformaciones. Corresponde al sistema de Salud y en especial a los que hoy lo conducen, introducir los cambios necesarios, pero sobre todo, poner ciencia al proceso, evaluando las intervenciones, produciendo tecnologías de la medicina familiar cubana, preparando a los recursos humanos para participar desde cualquier posición del sistema en esta transformación; convirtiéndose en verdaderos agentes de cambio”.*

En la introducción, aparece definido lo que significa en términos de prevención y control de enfermedades, la Pesquisa Activa (PA); cuando se publicó este artículo que cito, la amenaza de una epidemia era lejana. Y llegó la pandemia, y la Pesquisa Activa nos ayuda a controlar el contagio y la trasmisión del SARS-CoV-2, en lo fundamental, a encontrar sintomáticos en las comunidades. Sobre el tema, 5 de Septiembre, se adentra en sus particularidades en Cienfuegos.

Infografía pesquisa activa magalys
Diseño: Gabriela Roig Rosell

La Dra. Anay Montalvo Ibarra, funcionaria de la Sección de Atención Primaria en la Dirección de Salud en la provincia, abunda sobre la significación de la Pesquisa Activa, como método para la detección de casos de Covid-19, y controlar clínica y epidemiológicamente la enfermedad:

“Sin dudas la PA distingue al sistema de Salud cubano; no quiere decir que en otras geografías no apelen a él, pero como la detección precoz y la prevención son características de nuestra medicina familiar, la epidemia nos encontró preparados para su control. En las áreas de Salud, el responsable resulta el director del policlínico con todo su personal, grupo básico, entre otros, y se coordina con las organizaciones sociales de la comunidad, que son quienes conocen allí las características personales, con la finalidad de investigar durante los estudios de foco, esclarecer contactos, sospechosos, y aislar de inmediato. El trabajo se desarrolla a partir del consultorio, y se designa un universo de pesquisadores.

“Desde la DPS se controla y manejan las estadísticas del comportamiento de la Pesquisa Activa, con monitoreo de los consultorios del territorio; calidad y organización, aislamiento de los pacientes, control de viajeros, acciones de promoción y prevención de salud por parte del equipo básico, así como el seguimiento de todos los pacientes relacionados con la Covid-19 en historias clínicas individuales. Quedó definido por área un médico coordinador del control sanitario internacional, quien es la persona encargada de ‘recibir epidemiológicamente’ al viajero, y mantener actualizada la base de datos, así como del resto de las acciones a ejecutar por el consultorio sobre las condiciones de aislamiento”, abundó la Dra. Montalvo Ibarra.

Así lo indica el protocolo del Ministerio de Salud Pública; de que se ejecute al pie de la letra, depende la vida y la salud de la población; y de ello está responsabilizado el personal, desde el consultorio, hasta el último eslabón del mecanismo, y por supuesto, influye la disciplina de la población en acatar lo orientado por los especialistas.

Con la Dra. Miriam Pellón Rodríguez, vicedirectora de Asistencia Médica del Área II, que en su jurisdicción tiene a zonas con casas de renta, a la cual acuden turistas, conversamos sobre el tema de la Pesquisa Activa: “Organizamos la PA de forma tal, que las zonas de riesgo, los centros estudiantiles y laborales, así como la población vulnerable sean pesquisados de manera diaria. Desde que comenzó la epidemia definimos la frecuencia de este trabajo y hemos contado con el apoyo de estomatólogos, tecnólogos y ahora se refuerzan los dúos en los consejos populares. Ante cualquier incidencia, sospechosos, contactos, viajeros, entre otros, relacionados con la Covid-19. Para que se tenga una idea, contamos en el consultorio No. 1, 92 casas de renta, y eso lleva trabajo de vigilancia epidemiológica”.

Una joven médico, la Dra. Arisley Relova Gil, titular del consultorio No. 26 de la propia Área II, responde a las interrogantes: “La zona de riesgo es aquella en la que hay un caso confirmado de Covid-19 o una fuente de infección por una enfermedad transmisible; mientras que en los grupos vulnerables se encuentran los adultos mayores, aquellos que padecen enfermedades crónicas descompensadas, personas con conducta deambulante, las familias disfuncionales o con riesgo social, entre otras. Durante las visitas a las viviendas y al detectar algún síntoma de la enfermedad, se actúa según los protocolos. Pero se pueden diagnosticar otras patologías no relacionadas con la Covid-19, durante la pesquisa”.

El Dr. Luis Leandro Sánchez Alemán, vicedirector de Asistencia Médica del Área VII, conocido como Policlínico Laboral, abunda sobre las complejidades de la institución que representa, para el desarrollo de la PA: “Contamos con 14 consultorios del médico y la enfermera de la familia, ocho en la parte residencial urbana, y el resto en barrios rurales de la periferia de la ciudad. Atendemos, además, empresas de la zona industrial catalogadas de primer orden y que llevan un médico, como por ejemplo, la Termoeléctrica, la Refinería de Petróleo, centros educacionales, como la Universidad, donde se forman estudiantes extranjeros, la Escuela de Conducta, entre otros. Todo lo expuesto, da la medida de lo fundamental que resulta organizar bien la pesquisa”.

Al llegar al consultorio No. 2 encontramos a un médico casi acabado de estrenarse, el Dr. José Enrique Alonso Pérez, residente de la especialidad de Medicina General Integral. El joven atiende a los pacientes en el consultorio, realiza la primera visita a los viajeros y aprende mientras trabaja; la juventud y los conocimientos que “carga” desde los tiempos de Universidad, pasan de la teoría a la práctica.

Durante una pesquisa, Francisco Martínez, de 59 años, resultó diagnosticado con un proceso infeccioso en un dedo del pie derecho, y acude al consultorio para tratamiento. Avanza la mañana; José Enrique y Loraine Poblet Tejeda, la seño, visitan a un contacto, y les acompaño, porque vista hace fe. Queda mucho por pesquisar, pero sin dudas, la valía de este método está probada.

 

* Revista Cubana de Salud Pública, versión On-line ISSN 1561-3127

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Magalys Chaviano Álvarez

Periodista. Licenciada en Comunicación Social.

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