Miguel Morales Madrigal: Entre dos amores raigales: la Medicina y la Caricatura

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A Miguel Morales Madrigal lo conocí primero en sus años de estudiante de Medicina, cuando apenas un muchacho, le revoloteaban mariposas en la cabeza, y ya desde entonces, soñaba con ser médico, diseñador y hasta pelotero. Humorista con habilidades sobradas en Informática, comenzó en un grupo de aficionados en sus años de universitario, “El Metroninazol”, que hacía reír a muchos auditorios.

De la mano de Catalina, su madre-padre, y por el sendero más difícil, el del sacrificio, se formó como ser humano y profesional, y después llegaron a su vida Cristian Miguel, Lliliam y Rosabel, y se completó la familia.

Especialista en Endocrinología y jefe del Grupo Provincial y de esos servicios en el Hospital Provincial de Cienfuegos (Endocrinología, Nutrición y Trastornos del Metabolismo), es el médico de muchos; pero además, un caricaturista estrella, miembro del staff del periódico 5 de Septiembre, premiado en muchos concursos en el mundo, quien desde su condición de profesional de la Salud le imprime una carga al contenido de cartoons sobre la pandemia de Covid-19, y que incursiona, también, en temas económicos y sociales de la realidad cubana y en otros como el racismo.

Iniciamos un diálogo online, que nos impone la cuarentena y le espeto mi primera interrogante:

¿Los conocimientos médicos te ayudan al tema de pensar una caricatura-mensaje de epidemia?

“¡Claro que sí! Por una parte, ser médico y estar en medio del fuego cruzado te hace ver disimiles situaciones que se presentan en el quehacer de un médico de estos tiempos de pandemia, y que son el pie forzado para una buena caricatura. Las ideas están por doquier: el paciente indisciplinado que usa la mascarilla de forma incorrecta o viola las medidas de confinamiento; el rostro de un médico cansado después de tantas horas expuesto al peligro por el bienestar de sus pacientes; la ardua labor de todos los que, de una manera u otra, están batallando contra el dichoso ‘bichito’. Tener conocimientos de Medicina, sobre todo de promoción y prevención en salud, te ayuda a transcribir el mensaje que quieres expresar en tu caricatura y que sea claro y comprensible para todo tipo de público. En ocasiones, caminando por mi hospital se dan situaciones que generan una caricatura y tengo que anotarlas en el celular para no olvidarlas”.

miguel morales madrigal

¿Cómo te las ingenias para dedicar tiempo al dibujo o a los programas que utilizas para la caricatura?

“Hay que volverse mago para lograr que las 24 horas del día te alcancen para todo lo que quieres hacer cuando eres médico especialista, jefe de un departamento y padre de familia. Se trata de llegar a casa y ayudar con las tareas hogareñas, pues mi esposa también es médico,  está en la zona roja y llega tanto o más cansada que yo a la casa (se refiera a la Dra. Lliliam Peraza, especialista en Medicina Interna). Después de un baño, compartir con la familia y estudiar una o dos horas sobre temas de mi especialidad, y ¡manos a la obra! Dibujar se ha convertido en un sedante para mí, me libera el estrés. Cuando estoy creando me desconecto del entorno, me sumerjo en una burbuja de éxtasis y placer indescriptible.

“Sobre el tiempo que le dedico a los programas de diseño, te he comentado en ocasiones anteriores que poseo conocimientos de informática y programación de software desde el Preuniversitario; esto hace que aprender y dominar programas de diseño no sea tan difícil y no me consuma mucho tiempo. Unos tutoriales en internet y luego mucha práctica”.

¿Pesa la caricatura, tanto como para abandonar tu carrera de profesional de la salud?

“¡Nunca! Si existe la reencarnación y vuelvo a nacer, estudiaría de nuevo Medicina y Endocrinología, como especialidad. La Medicina es mi pasión, mi sueño cumplido, mi profesión. El placer de devolver el bienestar, la felicidad y la salud a un ser humano y su familia no tiene comparación. Para mí la caricatura es el complemento a mi vida profesional, un hobby que sin darme cuenta ha pasado a ser mi segunda profesión, en la cual encuentro el sosiego que el trabajo diario como médico en ocasiones me quita”.

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¿Qué dice tu familia sobre este talento que posees? ¿Cuánto celebran tus premios y reconocimientos?  

“Todos están muy orgullosos y lo disfrutan mucho. Mi madre ve el fruto de su sacrificio; fue ella quien desde niño me introdujo en este maravilloso mundo, y pese a todas las dificultades familiares y económicas de esa época, no dejaba de llevarme a la Casa de Cultura a talleres de dibujo. Yo no faltaba a un ‘tiza sobre el asfalto’ y siempre pendiente de cuantos eventos tuvieran lugar en la provincia relacionados con la caricatura. Siempre fui adicto, sí, adicto es la palabra, a la caricatura cubana. A mí no me podía faltar una edición de la revista Cómicos, el Muñe, Pionero, Melaíto, Dedeté, etc.; y allá iba la vieja a buscármelas, dondequiera que quedara disponibilidad, en ocasiones hasta en La Habana. Mucho de esto se lo debo a ella.

“Mi esposa disfruta cada publicación, reconocimiento y premio como si fueran de ella. Sin su ayuda sería imposible. A veces asume mil tareas en la casa a la misma vez para que yo pueda dibujar y no molestarme.

“La caricatura y el humor en los temas sociales tienen gran impacto, te retroalimentas de lo que escuchas en consulta, la calle, el barrio.

Los temas sociales son mis preferidos. La caricatura alcanza su máximo poder y beneficio para la sociedad cuando es capaz de denunciar un hecho, de hacer reflexionar sobre determinada situación que aqueja a un grupo de personas, o cuando destaca algo positivo, porque tampoco se trata de siempre criticar.

“Cuando eres caricaturista desarrollas un sexto o séptimo sentido que te permite convertir de forma prácticamente automática e inconsciente una situación determinada en una caricatura. Siempre estás con ‘la oreja parada’ por donde quiera que vas; de pronto sacas tu celular, abres el editor de texto y escribes algo como así: ‘dependiente pidiendo distanciamiento social, pero lo está haciendo gritando sobre los alimentos y sin el nasobuco puesto’. Y ahí está la idea para una nueva caricatura. Hasta durmiendo se me ocurren ideas, pero de esas no me acuerdo mucho al otro día, desgraciadamente.

“No creo que esto sea exclusivo de los caricaturistas, todos los cubanos nacemos con esta habilidad. Históricamente de las situaciones más difíciles siempre hemos generado un chiste, un cuento o en los tiempos actuales, un meme. En ocasiones, mis amigos o pacientes, e incluso hasta desconocidos, me escriben para darme ideas de situaciones o hechos que han vivido para que realice una caricatura al respecto. En agradecimiento, siempre trato de complacerlos y algunas de mis caricaturas han nacido de esas ideas.

“Para la caricatura internacional si me nutro de las noticias. Me levanto bien temprano en las mañanas para recorrer la red de redes en busca de material para mis dibujos. Leo alrededor de 15 o 20 diarios de distintos países para ver que está aconteciendo en el panorama internacional, hago anotaciones y después las transformo en arte”.

Una larga lista de publicaciones, premios y medios donde se han publicado sus trabajos, dice sobre la vida profesional de la caricatura de este médico que nos hace reír, reflexionar y pensar:

*Miembro de Cartoonmovement.com (Sitio holandés de caricatura internacional con más de 500 artistas internacionales) donde tiene varios trabajos.

*Publicaciones en la revista brasileña SUPAPO.

*Miembro de Cartooning for Peace (ONG francesa con alcance e impacto internacional. Los trabajos ahí publicados son emitidos y comentados en el programa francés de televisión Une semaine dans le monde).

*Ha publicado caricatura en el prestigioso periódico británico The new Internationalist.

*Tiene publicaciones en Vibes Club Saigon Newspaper (Vietnam), en Centro Studi Dialogo E-magazine (Italy), en el prestigioso sitio Irancartoon.com, y en los periódicos cubanos 5 de septiembre, Girón, Vanguardia y Melaíto.

*Nominado para premio en Concurso de Caricatura de Rumania.

*Sus obras han sido seleccionadas entre 500 caricaturistas para publicación en fivemedia.com sobre el racismo.

*Semifinalista en Concurso Internacional de Irán Palestine is not Alone. Aún no publican los resultados de la final.

Migue, como le conocemos sus colegas del “5”, amigos, vecinos, pacientes, es un médico-humorista, que nos hace reír y reflexionar; pero que además, nos enseña cómo vivir con diabetes y hasta a usar un glucómetro. Resulta un muchacho que guarda un enorme compromiso social con la vida y se reparte entre sus dos grandes amores: la Medicina y la caricatura, sin que Lliliam y Catalina se pongan celosas.

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Magalys Chaviano Álvarez

Periodista. Licenciada en Comunicación Social.

Un Comentario en “Miguel Morales Madrigal: Entre dos amores raigales: la Medicina y la Caricatura

  • el 19 febrero, 2021 a las 3:43 am
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    Muchas felicidades a Miguel como siempre le digo en el hospital de Cienfuegos , siempre cordial y muy dispuesto a atender si lo necesitas, excelente profesional de la medicina y del arte, exitos

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