Los 60 de Los Bohemios: para que no muera la vieja trova

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El trío Los Bohemios de Cienfuegos —compuesto por Emilio Castellanos, Ángel Gilberto Martell Matos y Armando Javier Quintana Surí—, fue el gran homenajeado este diciembre por el colectivo del Museo de las Artes Palacio Ferrer: 60 años de vida artística impulsando la música cubana, no pueden pasar desapercibidos. Más aún, tratándose de un formato sonoro que es patrimonio; pura esencia nuestra que nos avala ante el mundo.

Nosotros tuvimos la dicha de presentarnos el 31 de diciembre de 1959 en los predios del hotel Jagua, justo cuando comenzaba a brindar servicios esa instalación. Pero desde antes, ya acudíamos a distintos lugares de la ciudad: tocábamos en casas de los amigos; pequeñas descargas, sin protocolo alguno.

Buenos recuerdos tengo de la casa de Adolfina Lazo; era como una promotora cultural sin título durante aquellos años en Cienfuegos. Ella, que también tocaba la guitarra y montaba sus numeritos, fue quien nos alentó para asistir esa noche hasta el ‘Jagua’”, nos comenta Emilio Castellanos Cepero, fundador de la agrupación y uno de los pocos fundadores-intérpretes que aún continúan activos en el país.

Según afirma: “Aquel día estaba en el hotel todo el mundo. Era la víspera de año nuevo, cuando su director nos invitó a trabajar de manera fija allí. ¡Imagínate nuestra alegría! Fue la primera gran noche de cientos que le seguirían durante 41 años”.

Castellanos recuerda con nostalgia la casona de Adolfina: “Ella nos hacía café a todos; pedía opiniones sobre esta o aquella canción, y al final, todos cantábamos juntos… Aquello se hizo tan popular que no cabía nadie en la sala de la casa, y las ventanas se llenaban de cabezas cuando la gente pasaba por la Calzada”, expresa Emilito.

Espacios para cultivar la vieja trova

Muchos cienfuegueros —los más longevos—, se preguntan por qué no perdura un lugar como aquel, donde pueda cultivarse la vieja trova, cuando en el patio aún existen exponente tan notables.

Los tríos, que disponen de un repertorio tan dulce, ameno para las personas de cierta edad; con letras evocativas, representativas, no tienen una mayor presencia en esta ciudad. Es penoso”, apuntó además, quien fuera el presidente de la Asociación de Tríos en Cienfuegos, desde 1987.

De acuerdo con anécdotas narradas a 5 de Septiembre, fue la provincia de Guantánamo —con el trío Los Martínez­—, la iniciadora de este movimiento a nivel nacional. Hasta allí —nos refiere— iban sus directores a efectuar reuniones, en las cuales se ponían de acuerdo para la correcta orientación; a dónde esparcir la semilla y el quehacer de estos conjuntos en otros territorios.

Cienfuegos llegó a superar con creces a otras provincias, incluso a La Habana. Conseguimos tener aquí 35 agrupaciones de este tipo en el festival provincial, incluso con presencia internacional con el trío mexicano Los Panchos, quienes tocaron de manera exclusiva en el ‘Terry’, en 2003”, aseveró Castellano.

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Los tríos, por desgracia, están confinados solo a los establecimientos turísticos hoy día: “Los Emperadores en el hotel Jagua, nosotros en el ‘Unión’, por ejemplo… Sin embargo, quién de la población cienfueguera llega a esos lugares a vernos, cuando todos sabemos que son locaciones bastante inaccesibles. Hace un tiempo, existió una peña en la Galería de Arte de la ciudad, pero aquello se extinguió”, comenta además Ángel G. Martell Matos, el tercer integrante y más joven.

Junto a lo expresado por Martell, podemos asegurar que la programación cultural de Cienfuegos, en su sistema institucional, apenas promueve tales agrupaciones. Asimismo, las disqueras nacionales las obvian, echando por tierra años de consagración y entrega, a todas luces opacada por el poder monetario que generan otros géneros musicales mediocres como es el reguetón.

¿Cómo es posible que un trío que enaltezca dignamente la cultura cubana con temas guaracheros, boleros, el vals, el joropo; interpretando exquisitamente clásicos como Lágrimas negras, Besos discretos, Dos gardenias, entre muchos otros, no posean una plataforma habitual donde los cubanos acudan a verlos?

Salvaguardar el futuro de estos cultores es mucho menos complicado de lo que hacen parecer directivos y entidades culturales. Es solo una cuestión de amor y preocupación por la música. Con menos recursos, pero con mucho tesón, se lograron memorables éxitos en el pasado, ¿por qué el presente tiene que ser distinto?

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Delvis Toledo De la Cruz

Licenciado en Letras por la Facultad de Humanidades de la Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas en 2016.

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