Listo para la arrancada el “14” de Cienfuegos
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El central 14 de Julio, insignia de la provincia de Cienfuegos, se encuentra listo para iniciar la molienda de la zafra 2020-2021, tras una eficiente etapa de reparaciones en aquellas áreas y equipos donde estuvieron los focos rojos de la pasada contienda.
De acuerdo con el ingeniero Amaury Rodríguez Depestre, director del ingenio rodense, si bien han hecho pruebas con carga, el visto bueno definitivo para la arrancada será el próximo 25 de noviembre, cuando en la prueba de zafra puedan comprobar el funcionamiento de la caldera de vapor número uno, de 35 toneladas, sometida a reparación capital, así como la regulación de las válvulas de seguridad, y el resto de la maquinaria.
Según el directivo, gracias al esfuerzo del colectivo, y a pesar de las limitaciones de recursos de todo tipo, pudo cumplirse, e incluso adelantarse, el cronograma en la ejecución de esta importante etapa previa. Agregó que la estrategia estuvo dirigida a resolver los llamados “cuellos de botella” detectados en la pasada zafra.
Entre las principales acciones restauradoras, Rodríguez Depestre enumera la fundición de la base del juego de cuchillas del molino número uno, reparación capital del enfriadero del central y el sistema de vacío; además de los trabajos para el mejoramiento del sistema de retroalimentación de bagazo y los “sacamantos” (dispositivos para extraer el guarapo) de los cinco molinos, así como el sistema de enfriamiento de los tres turbogeneradores.
Completaron la lista de las labores de envergadura, la insulación de toda la red de tuberías de vapor, beneficiada con el revestimiento de amianto, lo cual, a juicio del director del “14”, contribuirá de manera decisiva a lograr índices superiores en la eficiencia energética de la fábrica.
Para el colectivo del otrora ingenio Manuelita la contienda consecutiva número 190 constituye un nuevo reto para sostenerse en la cima de la evaluación integral que hace el Grupo Empresarial AzCuba. Como en los últimos años hay confianza y disposición, esta vez para estremecer de alegría al batey con el pitazo del cumplimiento, una vez que lleguen a las poco más de 30 mil 500 toneladas del crudo, fijadas en el plan técnico y económico, y como siempre, aportar un poco más.
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