Línea construida: el tiempo de los edificios que hablan
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Al principio habló la poesía, esa que camina imperceptible entre la gente, entre las calles de la ciudad desnuda. Luego fueron los edificios… y de esa conversación continúa con la historia, la identidad, lo cotidiano, emergieron las obras de Línea Construida, una exposición colectiva que acoge la galería Maroya del Fondo Cubano de Bienes Culturales (FCBC) en Cienfuegos.
La locución espiritual de Fabián Sotolongo, Alain Martínez, Camilo Villalvilla emerge sin desenfado alguno en sus modos particulares de crear, pero que tienen puntos en común entre sí, sobre todo en la manera de asumir su contexto histórico-cultural.
En la muestra, la cual exhibe una amplitud de formatos y técnicas, aunque predomina el acrílico sobre el lienzo, cada uno de los artistas juega de una manera u otra con la iconografía arquitectónica de Cienfuegos.
Proponen temas emergentes en la contemporaneidad como la comunicación, el impacto de los estereotipos visuales, la estética soviética en la Cuba de los 80, la producción en serie, el hombre que produce y halla música en la ciudad, del ser involucrado profundamente con su espacio físico.
“Sin dudas, línea construida, es una muestra/triada perfecta que salva identidades desde una nueva dimensión”, escribió Celia Joya, especialista del FCBC.
Más allá de las particularidades en los modos de crear de los artistas, donde Alain Martínez y Camilo Villalvilla coindicen en determinados momentos dado su formación como arquitectos, vale resaltar la armonía que renace dentro del marco expositivo.
Hasta principios del 2017 estará a disposición del público, una muestra donde los edificios hablan, hablan de Cienfuegos y de Cuba.
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