José Martí, luz en el alma de Cuba

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Asido al corazón de cada cubano de bien.  Así ha de andar José Martí, el hombre humanísimo, poeta y patriota.

Martí, sencillo como sus versos inolvidables, el de la Rosa blanca, el amigo sincero.  Ese que no descansó en su lucha por Cuba libre y una América Unida, “desde el Río Bravo hasta la Patagonia”.

(…) Los pueblos que no se conocen han de darse prisa para conocerse como quienes van a pelear juntos”, sentenciaría en su ensayo Nuestra América y sus palabras calan hoy muy hondo.  De la Unidad de la América toda depende la salvación y preservación de nuestras tierras del voraz apetito imperial.

Asido a nuestra alma debe y tiene que estar quien decidió echar su suerte con los pobres de la tierra, quien no distinguió razas y no desdeñó a persona alguna para la lucha y aunó a pinos nuevos y viejos en el mismo ideal.

Clara es su convicción de que solo con la unidad es posible vencer.  Lo dijo en su discurso pronunciado, allá en el Liceo de Tampa en noviembre de 1891

(…) Y pongamos alrededor de la estrella, en la bandera nueva, esta fórmula del amor triunfante: “con todos y para el bien de todo”.

Mucho hay que aprender de Martí, el padre amoroso que sufrió como pocos la separación de su hijo a quien dedicó sus versos más tiernos.

En estos tiempos en que Don Dinero pretende prevalecer ah que volver al Hombre de la Edad de Oro. Son sus hermosísimas cartas a María Mantilla, a través de las cuales le y nos hace comprender el valor de la sencillez y la honradez y de ponderar a los seres humanos por sus valores morales que por su economía.  Son, además, una muestra del consejo sabio y oportuno y la mejor manera de conducirnos por el mundo.

“(…) Quien tiene mucho adentro, necesita poco afuera. Quien lleva mucho afuera, tiene poco adentro, y quiere disimular lo poco. Quien siente su belleza, la belleza interior, no busca a fuera belleza prestada: se sabe hermosa, y la belleza echa luz (…)”

Como una luz en el alma de Cuba, presente y guiándonos día a día; así ha de andar José Martí, más allá de fechas memorables, porque su ideario y legado permanecen vivos; llamándonos a estar alertas y no dejarnos confundir.

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Tay Beatriz Toscano Jerez

Periodista.

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