Inicia en España ronda de consultas para la formación de Gobierno
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A los efectos de iniciar el proceso de formación de gobierno, durante miércoles y jueves el rey Felipe VI realizará una ronda de consultas con todos los partidos políticos que el pasado 28 de abril obtuvieron representación parlamentaria en los comicios generales en España.
El monarca comenzará los encuentros con el líder de la formación que tiene menor presencia en el Hemiciclo, el Partido Regionalista de Cantabria (PRC), con tan solo 1 diputado, para concluir el jueves a las 6 de la tarde (hora local) recibiendo al presidente en funciones, Pedro Sánchez, del Partido Socialista, la formación más votada en las elecciones.
De acuerdo con lo establecido por el régimen monárquico, una vez concluida la consulta y con constancia sobre cuál de los representantes tiene el apoyo mayoritario, el rey propondrá un candidato para ser investido presidente de Gobierno, que con toda probabilidad será Pedro Sánchez.
Como en anteriores citas, y por las manifiestas discrepancias con el modelo de Estado, EH-Bildu y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), no enviarán a ningún representante a la Zarzuela a entrevistarse con el rey.
¿Qué sucederá tras la ronda de consultas?
Durante los contactos en estas dos jornadas, Felipe VI tanteará a las diversas formaciones políticas para conocer las posibilidades que tienen los diferentes candidatos de reunir los apoyos suficientes para lograr la investidura como presidente de Gobierno. En este caso, quien se encuentra más claramente en esa tesitura es el presidente en funciones, el socialista Pedro Sánchez.
Si el monarca cree que Sánchez tiene posibilidades de superar la investidura propondrá su nombre a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, quien a su vez preguntaría al candidato sobre cuánto tiempo necesita para cerrar los acuerdos y lograr los apoyos necesarios antes de programar la fecha de la sesión de investidura.
En ese Pleno, Sánchez necesitará recabar la mayoría absoluta de la Cámara, es decir, al menos 176 de los 350 diputados con los que cuenta el Hemiciclo. Si no consiguiese ese respaldo, se sometería a una segunda votación 48 horas después, cuando solo necesitaría reunir una mayoría simple: más ‘síes’ que ‘noes’.
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