Gregorio, el delegado fundador del Plan Turquino en Cienfuegos

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A la vuelta de 35 años muchas son las anéctotas y recuerdos que revoletean en la memoria de Gregorio Rodríguez Pérez, el Delegado del Naranjo, como más era conocido entre los pobladores de ese agreste paraje del macizo montañoso de Guamuhaya, en la provincia de Cienfuegos.

“Cuando comenzó el programa del Plan Turquino (PT) en el lomerío, allá por junio de 1987, esa era mi responsabilidad en la Circunscripción número 74 y cinco años más tarde me eligieron como presidente del Consejo Popular, el primero del municipio de Cumanayagua, con 26 demarcaciones que abarcaban desde Río Hondo hasta Topes de Collante, incluía, además a Las Moscas, Arimao y llegaba a parte de Cimarrones”.

El hoy reparador e instalador de teléfonos de largas distancia de Etecsa rememora que una vez iniciado el PT por día se veían los cambios, tanto desde el punto de vista de la economía como  de las nunerosas inversiones de carácter social. Entonces vienen a su mente la construcción de los 24 campamentos del Ejército Juvenil del Trabajo, los que se llenarían de soldados alegres, cuya misión consistía en impulsar la producción de café en  las lomas.

“Mira, comenta, solo en el asentamiento de Aguacate se le dieron tres lindas sorpresas a sus pobladores: se le construyó la carretera de acceso, asfaltada y todo, llegó el servicio telefónico allí y por primera vez los hogares pudieron disfrutar de la corriente eléctrica y sus beneficios para asombro de pequeños y grandes que de pronto vieron iluminarse las noches y poder deleitarse con la magia de la televisión”.

Por supuesto, este es solo un ejemplo de las tantas obras que llegaron para admiración y deleite de los montañeses. Así, poco a poco, brigadas de constructores, de trabajadores de la Empresa Eléctrica y de las Comunicaciones, Transporte del Comercio y la Gastrononía, de Salud y Educación fueron aportando como las obreras de una gran colmena a hacer mucho más placentera la existencia en este lugar.

En el bando de los que fundan y crean, Ortega Pérez apenas quiere reconocer su modesto aporte a esta gigantesca obra que ha sido el Plan Turquino en estas tres décadas y media de trabajo, con sus altas y bajas, es verdad, pero siempre con la misma intención de mejorar la calidad de vida de sus habitantes.

En los tiempos de mayor explendor surgieron los combinados de servicios, salas de televisión, sucursales del Banco Popular de Ahorro, consultorios médicos, céntros recreativos, instalaciones deportivas, panaderías, un coopelia en Cuatro Vientos y en este mismo lugar un hotelito, farmacias, la red de viales en buenas condiciones llegó hasta los más recónditos sitios… en fin, ¡una revolución dentro de la Revolución!, exclama Gregorio.

Para ilustrar mejor el modo en que este sueño ha seguido avanzando, el otrora delegado menciona la creación de dos zonas wifi, más de 60 servicios públicos de telefonía, y en algunos lugares, como en Aguacate, hubo que retirar los equipos por obsolencia, los que fueron sustituido por los nombrados TFA (Telefonía Fija Alternativa) mucho más modernos. Las posibilidades tecnológicas en La Sierrita, dice, permitieron instalar 24 Nauta Hogar.

De aquello años intensos y creativos Rodríguez Pérez recuerda las “calientes” reuniones de chequeo, en las que el primer secretario del Partido en la provincia de entonces, Humberto Miguel Fernández, “le sacaba los colores al incumplidor o responsable decualquier chapucería”, rememora.

A poco de recibir el reconocimiento especial de fundador del Plan Turquino, en el acto provincial por la efeméride, Gregorio dice expresar el agradecimiento en nombre de todos sus coterráneos, por lo que ha significado este hermoso y humano programa en todos estos años de transformciones, aun cuando ha tenido que apelarse al ingenio criollo, la innovación y emplear múltiples alternativas ante las enormes limitaciones a consecuenciadel bloqueo económico, financiero y comercial impuesto a Cuba por los sucesivos  gobiernos de los Estados Unidos.

Las máximas autoridades de la provincia le entragan a Gregorio Rodríguez Pérez un reconocimiento en su condición de fundador del Plan Turquino./Foto: Modesto Gutiérrez Cabo (ACN)

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Armando Sáez Chávez

Periodista de la Editora 5 de Septiembre, Cienfuegos, Licenciado en Español y Literatura y Máster en Ciencias de la Educación

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