El médico de El Sopapo

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Rolando Heriberto Hernández Caballero es el médico de El Sopapo, llegó desde la comunidad de Breñas, en Cumanayagua, donde vive, hace tres años, en 2018, con su título bajo el brazo y la experiencia que acumula un recién graduado. Se instaló en la casa-consultorio, y comenzó desde entonces, una vida nueva para él y para los montañeses de la zona.

“No puedo negar que al principio sentía un poco de temor al enfrentarme a los pacientes, son más de 600, pero lo superé; hoy puedo afirmar, que soy un guajiro más acá arriba, y nada mejor que conocer a los pacientes, sus costumbres, modos de vida, para saber cómo curarlos y sanarlos. Sentir un pitazo en la madrugada daba mucho miedo, porque ello significa enfrentar una emergencia, pero he aprendido a manejarlas sin temor, con mucha ecuanimidad.

“Ya estoy en el tercer año de la residencia en Medicina General Integral, y acá las enfermedades más comunes son las crónicas no transmisibles, porque hasta en la montaña la población está envejecida”.

¿Cómo se ha controlado la epidemia de Covid-19 en la montaña?

“Ha transcurrido sin grandes eventos de transmisión ni contagios, porque te decía que conozco muy bien a la población que atiendo y eso ayuda a prevenir, que es el ABC de la medicina familiar. Ciertamente hemos tenido contagiados, pero hemos podido frenar a tiempo la transmisión. He estudiado mucho sobre las características y comportamiento de la enfermedad y cada vez que me llega alguien con síntomas, procedo como si se tratara de Covid-19, en primer lugar.

“Concluimos la campaña de vacunación a niños entre dos y diez años, y entre once y 18, y resultó un éxito. Acudieron a los vacunatorios como a una fiesta, y eso es lo que pretendíamos, que fuera un festival por la salud y la vida. En la comunidad contamos con el apoyo de los factores, y desde el día anterior al inicio quedó listo el vacunatorio, que por cierto fue nuestro consultorio. Hasta aquí vinieron los niños, incluso desde El Naranjo, una comunidad alejada”.

Casa-consultorio del médico de la familia en El Sopapo. /Foto: de la autora

¿Regresarás al llano al terminar la Residencia?

“Bueno, no lo tengo pensado, estoy muy apegado a la gente de acá, a esta comunidad, conozco los males de todos, cómo tratarlos, y si tomara esa decisión de seguro me costará. Por ahora pienso seguir aquí, trabajando y evitando que mi gente se me enferme, y contando con ellos para el control de la epidemia. Estas montañas son muy sanas y me gusta estar aquí”.

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Magalys Chaviano Álvarez

Periodista. Licenciada en Comunicación Social.

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