El agua de Cienfuegos volverá a fluir por las llaves secas (+Galería)

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En agosto pasado la bomba del sistema hidráulico de Lagunilla estaba rota y bajo agua, llevaba tres meses en ese vagar por el universo de lo inservible. No mejor destino corría la de reserva en la potabilizadora de Paso Bonito, certificada como “fuera de juego” desde las grandes avenidas provocadas por las lluvias de la tormenta tropical Alberto, comprometiendo así la función de la planta ante una eventual avería de las otras dos existentes.

En agosto pasado las paradas no planificadas en Paso Bonito fueron sistemáticas, sobre todo, por roturas en los primeros 500 metros de la conductora. En esa misma fecha comenzó a reducirse la entrada de agua al tanque de Caunao, donde se almacena y distribuye para la ciudad, y llegó a recibirse menos de 600 litros por segundo (l/s) de los 900 previstos por diseño según indican especialistas de Recursos Hidráulicos. A partir de entonces demoraría casi 18 horas en alcanzar su cota de llenado: 45 mil metros cúbicos.

En agosto pasado Acueducto Municipal disponía de un carro cisterna (pipa) para toda la urbe; llegar a ella era casi un acto olímpico, de batallas telefónicas y de colas los lunes en la oficina de atención a la población.

En agosto pasado los vecinos de Pueblo Griffo, Pastorita, Arizona, La Juanita, El Bar Pedro, la cuadrícula urbana comprendida desde 27 hasta 33 entre las avenidas 58 y 60, Rancho Luna, además de otras áreas citadinas, comenzaron a sentir que el preciado líquido era un tema oscuro en sus vidas.

En agosto pasado el abasto de agua a la ciudad de Cienfuegos colapsó y se convirtió en auténtico dolor de cabeza.

EL PARO DEL 8 DE NOVIEMBRE

Ante una situación tan compleja las miradas del nivel central hacia la provincia se hicieron más efectivas, aunque según reconoce la máxima dirección del Grupo Nacional de Acueducto, ya ellos venían chequeando cada jueves, antes de agosto incluso, lo que pasaba en Cienfuegos. Sin embargo, la realidad descrita da margen a la duda.

Varios frentes se han abierto en la actualidad para mejorar el servicio de agua a la ciudad, entre ellos, el cambio de diez válvulas dentro de la urbe, trabajos que repercuten en optimizar la distribución; la llegada de doce nuevas pipas para el municipio; la sustitución de los primeros 555 metros de tuberías en la planta de Paso Bonito; además de la erradicación de 25 dispositivos conectados ilegalmente a la red hidráulica para regadíos y otras actividades de índole comercial.

Con la sustitución de los primeros 555 metros de la conductora a la planta de Paso Bonito se esperan recuperar 200 l/s. /Foto: Dorado

El día 8 de noviembre, programado un paro de agua, figuró como el más productivo en aras de revertir la situación, aunque a decir verdad, semanas atrás tanto entidades estatales como representantes de Gobierno y del Partido en la provincia se alineaban en fila cerrada para avanzar hacia un mismo destino: recuperar lo perdido.

“En el rebombeo de El Junco estamos instalando dos bombas nuevas de tecnología alemana, una para el poblado de Junco Sur y otra que va a abastecer la zona hotelera, además del Consejo Popular de Rancho Luna. Esta última no es la ideal, pero tiene un poco más de flujo, tira 70 l/s y 90 metros de carga.

“En el área hotelera hay un tanque que normalmente nunca se llena, y con esta bomba pretendemos cumplir con eso, para luego hacer las operaciones correctas y mejorar el abasto incluso hacia Pasacaballo”, dijo a la prensa Juan Vidal de la Torre, director de mantenimiento y equipos del Grupo Nacional de Acueducto.

Ambas bombas, adquiridas en el mercado internacional por un monto superior a 18 mil euros, deben resolver un problema histórico en esas zonas. Durante el momento de su montaje, el pasado 8 de noviembre, el Hotel Racho Luna se encontraba cerrado desde hacía días a causa de la falta de agua para brindar sus servicios, a pesar de ser temporada alta del turismo en Cuba.

Mientras ello ocurría a pocos kilómetros de la ciudad capital, un poco más lejos, allá por las faldas del macizo de Guamuhaya y a unos pocos pasos de la potabilizadora de Paso Bonito, varias brigadas de distintas provincias del país se afanaban en empalmar la añeja conductora con la nueva. Allí la tierra estaba abierta, lista para que nuevos cauces alimentaran de agua la vida humana.

“Unir la vieja instalación metálica con el nuevo tramo de polietileno de alta densidad podría suponerse algo complejo, pero concebimos conectarlas mediante secciones de tuberías que ya habíamos conformado en los astilleros; en realidad no es difícil, la mayor parte del trabajo es de soldadura. Lo engorroso en esta jornada ha sido la lluvia, estamos desde temprano, pero hay que abrir las zanjas en la tierra mojada y organizar bien el trabajo”, afirma José Ernesto Vázquez Valencia, de la Empresa Nacional de Astilleros (ENA).

Entrada ya la noche del jueves, los trabajadores seguían sus faenas, alumbrados por grupos electrógenos, en medio de un entorno rural donde las casas se vuelven aisladas y silenciosas. Trabajaban sin descanso a pesar de las inclemencias del tiempo y las picadas y el zumbido de los mosquitos en los oídos. Todos por un beneficio común:

Con rostro visiblemente cansado ya a esa hora de la noche, pero junto a su equipo de trabajo, Pablo Fuentes Chaviano, delegado de Recursos Hidráulicos en la provincia, enfatizó que “la sustitución de este tramo —frecuentemente afectado por roturas—, además de garantizar la disponibilidad de agua, nos suministrará mayores volúmenes. Eso, de conjunto con la erradicación de salideros e ilegalidades, permitirá reducir los volúmenes de la mezcla y mejorar la calidad del servicio”.

Aunque las labores se extendieron hasta este viernes día 9, ya mediada la tarde comenzó a entrar agua al tanque de Caunao. El llenado demorará unas horas, pero pronto se restablecerá la distribución a la ciudad.

FUTURO Y LA ESPERANZA

Disponer de un nuevo sistema de abasto de agua a Cienfuegos es un propósito cuyo monto calculado está por sobre los 60 millones de pesos, una inversión fuerte y que no vendrá ahora mismo desde el financiamiento central, sino que la esperanza camina sobre un proyecto colaborativo a mediano plazo entre una agencia francesa de desarrollo y las autoridades locales.

Lograr un 85 por ciento de eficiencia en la conductora de Paso Bonito implicará una reducción en los volúmenes de agua cruda (300 l/s) que hoy se mezclan con la tratada. Por ello, durante 40 días al año, sobre todo en meses de lluvias continuas, se hace muy evidente el incremento de los niveles de sólidos diluidos, de hasta entre 100 y 200 UNT (sigla de medida Unidades Nefelométricas de Turbidez) en el preciado líquido, cuando la norma cubana 827:2010 establece menos de 10 UNT en la que debe ser servida en los hogares.

“Hoy la planta toma el agua directamente del fondo de la presa. A futuro es ya un acuerdo del Grupo Nacional instalar una toma flotante, lo que nos permitirá tomar el agua de diferentes niveles de la presa, de donde mejor este; eso nos ayudaría un tanto hasta alcanzar el completamiento de los filtros de la potabilizadora.

“Mejorar el sistema de distribución, la eficiencia y respetar la capacidad de tratamiento de la planta se traducirá en calidad. Pero eso no se debe confundir con el entrecruzamiento de las aguas, ya sea albañales o lluvia, ese es otro asunto que hay que resolver (…) No vamos a contar con financiamiento central para rehabilitar las redes de la ciudad, sin embargo, por concepto de mantenimiento podemos cambiar tramos de redes por cuadras”, agregó Fuentes Chaviano.

El entrecruzamiento generalmente sucede en una conductora en mal estado, con servicio intermitente. Allí por donde está el salidero entran por succión las aguas sucias, ya sean pluviales o de albañales. El centro histórico urbano de Cienfuegos, con redes de más de 100 años de explotación, es uno de los barrios con más incidencia, aunque no es el único. Varias brigadas de Acueducto, además, trabajan en estas zonas desde hace algunos días para paliar momentáneamente la situación.

La jornada del 8 de noviembre pasado fue solo el comienzo de un nuevo camino hacia la mejora del abasto de agua, un paro que marcó historia y esperanza. El agua de Cienfuegos volverá a fluir por las llaves que hasta ahora estaban secas.

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Zulariam Pérez Martí

Periodista graduada en la Universidad Marta Abreu de Las Villas.

3 Comentarios en “El agua de Cienfuegos volverá a fluir por las llaves secas (+Galería)

  • el 10 agosto, 2019 a las 6:06 am
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    Y q pasó con todos esos arreglo q hoy hace un mes q en una parte de casco histórico no recibe el abasto de agua y no hay pipas suficientes con condiciones de mangueras para prestar servicio y todos los días cuando nos corresponde el abasto de agua no llega por las presiones están bajas , ya no saben q van a inventar.

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  • el 11 noviembre, 2018 a las 6:47 am
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    Muy bien por la direccion y los trabajadores que acometen digna tarea.
    En trabajos anteriores se hacia referencias a las ilegalidades en el trayecto de la tuberia hasta llegar a Caunao , salideros en las tuberias distribuidoras ,acometidas y por si fuera poco la indolencia de los consumidores al no preveer de valvulas foltantes sus tanques y cisternas .
    seria importante hacer algun trabajo periodistico que ponga a relieve todas esas cosas.
    Los salideros constituyen unas de las fugas de agua mas importantes que hoy tenemos …es criminal ver como el agua corre por las calles buscando refugio en el MAR , al mismo tiempo acabando con la subbase de las calles.

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  • el 10 noviembre, 2018 a las 4:55 pm
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    Me gustó su trabajo periodístico, solo aclarar donde ““En el rebombeo de El Junco estamos instalando dos bombas nuevas de tecnología alemana, una para el poblado de Junco Sur, sustituir Junco Sur por el poblado del Junco, conocido como Junco Viejo.
    Sería bueno saber qué medidas y sanciones se le aplicaron a los infractores y a los que autorizaron a dichas conexiones, para que sirva de ejemplo pues el agua de la Ciudad es intocable, desde sus inicio el Secretario del PCC Humberto Miguel Fernández tenia bien claro este concepto y no han sido poco los que han intentado siempre, mal utilizar el agua de Cienfuegos, sin pensar en el futuro.

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