Covid 19, un alto en el camino del saber científico

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El rumbo científico del país cambia en la etapa post pandemia; además de investigaciones médicas y biotecnólogicas, autorizaron la creación de parques tecnológicos y unidades interfase entre investigadores y empresarios, así como entidades de alto valor agregado.

Eduardo López Bastida asistió en 1980 como ingeniero químico a la exposición nacional Forjadores del Futuro.

“Allí fue el Comandante en Jefe Fidel Castro y nos dijo que todos los profesionales teníamos que hacernos doctores, y gracias a él, elevé mi grado científico”

Cuenta así sus inicios el actual presidente de la filial de la Academia de Ciencias en Cienfuegos. Hoy es Máster en Eficiencia Energética y Diseño Técnico, y en Manejo Integrado de Zonas Costeras, así como también Doctor en Ciencias Químicas y Económicas.

¿Cómo la Academia da continuidad al legado de sus precursores?

“Actualmente contamos con alrededor de 400 asociados, y cinco provincias disponen de filiales. Junto a la nuestra se encuentran Villa Clara, Sancti Spíritus, Santiago de Cuba y Camagüey. Aquí la constituimos hace un año, y ahora realizamos el pleno por videoconferencia”.

¿Quiénes componen la filial en la provincia?

“Estamos agrupados en miembros de mérito, titulares (efectivos por 12 años) y miembros de honor, junto a jóvenes destacados. Contamos con el Doctor Alfredo Espinosa Brito con la máxima categoría y es nuestro presidente de honor; además, tres académicos titulares y dos jóvenes asociados.

“Existe un colectivo de colaboradores y tres sedes: las dos universidades y el Hospital Provincial Gustavo Aldereguía Lima; la función es consultiva y de asesoría, en pos de crear una cultura científica”.

¿Cuáles son los retos de al actual epidemia de covid-19?

“El pleno nacional hizo un reconocimiento a la filial cienfueguera por nuestros aporte. El Doctor Espinosa Brito escribió dos artículos basados en sus experiencias en epidemia, publicados en la revista científica Anales de la academia.

“También el Dr. Víctor René Navarro publicó sobre la creación de centros de aislamiento, y estudiosos de las ciencias sociales divulgan aspectos acerca de la recuperación. Asimismo, destaca la participación juvenil en el enfrentamiento a la pandemia y la labor sicológica con los adultos mayores. Sobresalen 30 proyectos investigativos de Ciencias Médicas”.

¿Cuál ha sido el hito de la covid-19 para la ciencia en Cuba?

“El pleno de la Academia de Ciencias de Cuba admitió un antes y un después de la actual pandemia en el rumbo científico del país; autorizaron la creación de parques tecnológicos y unidades interfase entre investigadores y empresarios, así como entidades de alto valor agregado.

¿Qué entidades cienfuegueras están implicadas en los cambios?

“En la universidad de Cienfuegos habrá un parque tecnológico dedicado a la energía, el medio ambiente y la informática; se trata de una agrupación para asociar científicos nacionales y extranjeros, a fin de socializar de inmediato investigaciones. Por otra parte, la Universidad de Ciencias Médicas lo hará sobre quehacer en la salud.

“Crearemos empresas de alto valor agregado en la Empresa Oleohidráulica y el Laboratorio de combustión, único del país. Otra concepción será la autorización a unidades presupuestadas de cuentas propias para el desarrollo de la ciencia y la técnica”.

La prioridad de la ciencia cubana frente a la covid-19 es continuar investigaciones médicas y biotecnológicas y extenderlas a otros países, así como fomentar el turismo de salud. Además, fortalecer la producción de alimentos, la eficiencia energética y el ahorro de agua”.

¿Qué otras experiencias aportará Cienfuegos al futuro de la ciencia?

“Tenemos en ‘Antonio Sánchez’ el único complejo agroindustrial de Cuba con factorías que lo complementan; allí imbrican central, fábricas de torula, de alcohol y de ron, esa experiencia puede generalizarse en todo el país”.

La Academia de Ciencias existe en Cuba desde la época colonial y estuvo integrada por el gran Carlos Juan Finlay, quien investigó una implacable epidemia que azotó al mundo por más de tres siglos: la fiebre amarilla. Hoy perpetúa el legado del  líder histórico de la Revolución, quien auguró un futuro de hombres de ciencia.

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