Consulta sobre Covid-19
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Por estos días, tiempo de epidemia, en los que resulta retórico el tema del nuevo coronavirus, circulan por las redes sociales y por la calle, cientos y cientos de consejos sobre la Covid-19. De cómo evitarlo, cómo nos hacemos inmunes, en fin, toda clase de cuasi certezas, que si fueran ciertas, hace mucho tiempo ya no fuera una pandemia. Por ello, queremos invitar a especialistas de las Ciencias Médicas, personas autorizadas a darnos buenos y creíbles consejos sobre cómo protegernos.
Y los dejo a seguidas con el Dr. C Víctor René Navarro Machado, presidente del Consejo Provincial de Sociedades Científicas de la Salud, especialista de II Grado en Medicina Interna y en Medicina Intensiva y de Emergencia.
Estimados amigos:
Estamos frente a una pandemia parecida a otras a las que la humanidad ya ha sobrevivido; baste mencionar las crónicas de la “Gripe Española”, en 1918, pero el precio pagado en vidas en el siglo pasado fue muy alto y los adelantos en materia científica y social no deberían permitirnos un resultado similar y mucho menos, que la enfermedad siga su “curso natural”.
Hoy el virus Sars-CoV-2 irrumpe como nueva amenaza (desconocido, sin inmunidad previa, más contagioso que el catarro común y mata a más personas), y se ha escrito mucho, en estos tres primeros meses del 2020, acerca de cómo se transmite, los síntomas “leves” y “graves”, nuevos tratamientos y vacunas, novedosos dispositivos y también historias cargadas de humanismo; esta es la primera epidemia que se transmite mundialmente en tiempo real y todos esperan cada día que aparezcan nuevas luces para la solución del problema.
Pero mientras eso llega, hagamos cinco razonamientos simples para evitar la enfermedad:
Distanciamiento social. Todas las enfermedades infecciosas tienen dos elementos principales: el germen y el huésped que puede enfermar; ambos deben encontrarse. Es preciso entonces, evitar contactos con personas enfermas, pero hoy no se conoce al que tiene la enfermedad; por tanto, hay que distanciarse de todos. Esta es la recomendación de más probada eficiencia. También la identificación y aislamiento de enfermos y sospechosos; pero eso le corresponde a las instituciones sociales.
Conducta individual responsable. Cerrar escuelas y limitar actividades de participación colectiva, son acciones que socialmente reducen la posibilidad de contagio; pero el elemento clave del distanciamiento social, está en cómo nos comportamos las personas. Hay que seguir las orientaciones sanitarias; una conducta adecuada protege su salud y la de los que lo rodean.
Proteger primero a las mucosas. El virus de la Covid-19 penetra principalmente por las mucosas (boca, nariz y ojos) Si cuando una persona tose o respira cerca, tenemos medios de protección, el virus no nos contagiará.
Lavado frecuente de manos. Excepto la exposición directa a las microgotas contaminadas al toser, escupir o respirar de una persona enferma; en el resto de las situaciones el vehículo principal de transmisión son las manos. El virus de la Covid-19 puede vivir en superficies por varias horas, si tocamos superficies contaminadas y no nos lavamos las manos, con ellas transmitirnos la enfermedad a nuestro cuerpo o a los amigos más cercanos. El lavado de manos (y la limpieza frecuente de superficies de uso acostumbrado) con jabón, hipoclorito de sodio o soluciones hidroalcohólicas reducirán enormemente las posibilidades de contagio.
La medida ideal: hacer las cuatro anteriores juntas. Unir las anteriores acciones le dará una posibilidad muy reducida de contagio.
La solución cursa entonces a título personal por tres actores, el primero y más importante usted lo puede controlar:
Evitar enfermarse, en gran medida depende de usted; si enferma, la intensidad de los síntomas dependerá de su sistema inmune;y si enferma de gravedad, su vida dependerá de su sistema inmune y de una adecuada atención médica.
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