Cienfuegos: Mujeres en la fragua
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El segundo evento de equidad de género que tiene lugar en Empresa Constructora de Obras de Ingeniería No. 12, resultó sin dudas, más provechoso que una ardua jornada desbrozando caminos, uno de los objetos sociales de la entidad constructora. En plenario, junto a la mayoría de sus trabajadoras estuvieron representantes de la Federación de Mujeres Cubanas, los jefes de brigadas, el sindicato y principales directivos, entre quienes analizaron todo lo relacionado con el cumplimiento de la política de género en las dimensiones de organización, funcionamiento laboral y capacitación.
Reynaldo Cama Fajardo, director general de la Ecoing-12; en compañía de EIdia Álvarez Hernández, funcionaria de cuadros en la organización, condujeron los debates que se suscitaron tras la exposición de los trabajos, los cuales versaron sobre análisis estadísticos, encuestas y presentaciones contentivas de cuánto aún les falta por alcanzar en empoderamiento dentro de la empresa.
“Aquí no abundan los oficios comunes de la construcción, digamos albañiles, encofradores, cabilleros o ayudantes. Nuestro objeto social explica el hecho de que preponderen los operadores de equipos pesados, lo cual hace que las cifras comparativas en cuanto a composición por sexo sean tan abrumadoras: de 523 trabajadores, solo 76 somos mujeres, sin sobresalir en cargos administrativos”.
María Teresa Mena Morales, directora de Capital Humano, un ejemplo de que las féminas pueden conducir tareas de dirección, expuso un trabajo que versó sobre el tema de capacitación, en el que destacan las mujeres: “No se trata de medir solo la productividad, es preciso medir el desempeño en puestos clave y que son ocupados por compañeras”, al tiempo que trajo a colación todo cuanto hacen por elevar el nivel profesional y la labor extensionista dentro de la empresa y desde las brigadas.
“Contamos con aulas anexas, círculos de interés y de orientación vocacional, sociedades científicas, maestras de oficios, en los que son imprescindibles las mujeres”, significó María Teresa en su presentación.
El reclamo recayó en poder contar en las brigadas con baños diferenciados, para hombres y mujeres, dotados de las condiciones imprescindibles; así como en adecuar el transporte obrero a las necesidades de quienes tienen niños pequeños y otros compromisos familiares. Los directivos de brigadas se comprometieron a solucionar estos detalles, que no constituyen problemáticas de género, sino tareas que pueden ser asumidas con prontitud.
Como colofón, el ingeniero Fidel Viñas cerró el evento con una apología a la mujer constructora, relatando los ejemplos vívidos de compañeras que se han destacado en el sector y alentando a sus colegas de trabajo a arrasar, porque los hombres de la Ecoing 12 confían en las mujeres que “adornan” con su trabajo la obra.
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